voy a entrenar a salome, a estarce inerte, y relajada, mientras viajamos en el camion,
a aburrirse como una piedra mojada, si es que sale asi la cosa.
con rulitos y trencitas, voy a peinar a salome.
hare que el aburrimento la curta definitivamente, para tentarla a vivir en mi camion toda la vida.
a pasar horas y horas, recorriendo millas y lugares diferentes.
voy a enseñarle a salome a manejar mi scania,
y le voy a acariciar las piernas, tantos kilometros como pueda.
no voy a contar las horas que falten para morir,
voy a estirar el tiempo, como una goma de mazcar.
voy a tener muchos hijos con salome, lo se,
porque soy un adivino, que todo lo ve, que todo lo sabe.
no voy a permitir, que el dia de mi casamiento, cuando estemos en la vereda, dandonos el ultimo beso de novios, y el primero de casados, con el camion lleno de latas en el espejo de la popa,
que ningun espiritu intente un cambiaso con mi personalidad, para llevarse quedarse con mi señora.
ese dia rebotaran como mensajes no deseados.
ese dia tan esperado, tendra duendes arrojando arroz en la puerta de la iglesia, fantasmas desnudos tocanado musica en el organo de la parroquia; ñomos llevando el vestido de salome,
que como una cleopatra marchara hacia el altar,
y angellillos ajustando el nudo de mi moño, humedeciendo con sus salibas el jopo, el peinado.
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