Estoy escribiendo desde un hueco y no puedo salir.


GRITO!!! cada vez que siento pasar a alguien.
Algunos se detienen, escuchan, buscan un poco pero no me encuentran.
Algunos me miran extrañados como preguntándose qué hago aquí abajo.
Algunos caen a veces, porque no se percatan. De éstos últimos todos han muerto.

La última vez que vi una soga,
se partió cuando trataba de subir (tendré que esperar una escalera?),
y quien la puso, de tarde en tarde me deja caer un papel con un poco de poesía,
eso me ha ayudado a ir sobreviviendo.
Eso y los muertos de los que me alimento.
Eso y el recuerdo de la soga.

Pero después viene el recuerdo de la soga crujiendo,
de las manos aferrándose a la tierra,
de la lucha desesperada por escalar,
de mí, de nuevo, cayendo.