ELLA ME DICE:
"Dan las doce,
los dedos osan
rascar las "ancas" de raso,
¡Rujen locos, celosos cardos!
¡arden nardos, rosas, alas, olas!
La Rana croa...
Jala el can una red en su jaula,
solas, las rejas de cera se secan...
Los dos, José, Oscar,
se lavan la cara.
En el cajón, los rulos
de la nuca con canas, se caen...
La Rana croa...
Lo juro ¡la jarana se cura!
anda, acá daré caldo a la sed...
La Rana croa..."
YO LE CONTESTO:
"Ranita, fiel aliada.
Y las ancas también.
Adiós celosos cardos.
El Can, en la jaula.
(No querrá salir).
Saciaré mi sed.
Correré el velo.
Blanca piel.
Dulces gemidos,
mezcla de sudores,
abrazo, placer, descanso.
Después. la almohada de tus senos. |