UNA LLAMADA PARA CLARA
Ring... ring... ring
¿No estás? ¿No quieres contestar?
Ring... ring...
¿Bueno?
Hola... pensé que no contestarías... que sabías que era yo y por eso no levantabas la bocina. Que idiota fui... ¿Cómo diablos ibas a saber que era yo? Sí ni siquiera tienes identificador... te llamo porque necesito verte, hablarte, oírte. Solamente somos amigos, lo sé, sólo me ves como la persona tierna, cariñosa, como el amiguito, el muchacho bueno, el que no mata ni una mosca, el bueno, él (en minúsculas y no ÉL, en mayúsculas), uno más, él... no me ves como el hombre que puede darte el afecto que necesitas. Maldición... suspiro... te has de ver tan linda, tan radiante. Un ángel bajado del cielo. Una estrella, una flor silvestre, mar en calma, mariposa frágil, claveles rojos... y mucha poesía para tu rostro, tu hermoso rostro... unos ojos y esa boca que me encanta; toda tú me gustas... completa... de la cabeza a los pies. Tu cabello cuando se humedece, tus labios color rosa, tu piel tersa...
(2 segundos)
Siempre he pensado en lo que te sucede... me preocupas. No tienes que rogarle amor a quien no siente nada por ti ¿Acaso no sabes que el querer lo encuentras donde no lo buscas? Sólo soy un ser humano... no sé si sea el hombre perfecto para ti. Tengo errores. Demasiados. Pero estoy seguro de que puedo brindarte todo lo que necesitas. Suspiro. Amor. Cariño. Un abrazo. Café caliente. Compañía. Amor. Mucho amor. Atención. Y todo mi corazón, Clara... puedes confiar en mí, Clara. Siempre sabrás que aquí estaré, esté mal o esté bien... me gusta tu sonrisa ¿Sabías? Y como dejas entrever esos dientes blancos, nacarados, perlas encerradas en dos cofres rojos... como quisiera no haberme enamorado de ti, de ti y de tus encantos. Cuanto desearía no pensarte, ser capaz de dejar de hacerlo, olvidarte, no sentirte, que mi corazón no palpitara más intensamente cada vez que te veo llegar... suspiro... nadie puede mandar sobre sus sentimientos. Tampoco quiero hacerlo. Me alegra amarte. Me entristece. Me confunde. En ocasiones me maldigo por no poder sacarte de mis pensamientos, por verte en mi mente en todo momento, en cada instante. Regrésame a la vida, sálvame, elévame, llévame al cielo, ven por mí acá abajo. Soy muy torpe con mis palabras... no deseo continuar solo, con mis temores, mis miedos, mi tortuosa soledad, miss oscuridades. Deseo tenerte a mi lado por siempre, por toda la eternidad. Llorar cada vez que viéramos juntos los amaneceres fríos; Sonrojarme al sentirte a mi lado al despertar; dejar atrás el pasado y comenzar contigo un futuro nuevo, sin errores, ni equivocaciones. Todo será nuevo, amada mía. Intentar reconstruir todo en un acto de valentía si la vida o el destino nos lo permiten... deseo tenerte a mi lado por siempre, para siempre, un día, siempre. Y descubrir que me amas, que eres la dueña de mis alegrías, mis tristezas, de mis sueños... no lo sabes ¿Cierto?
(5 segundos)
No recuerdo el instante preciso en que me enamoré de ti ¿Fue una tarde soleada en la que me abrazaste? ¿O esa noche cuando lloraste sobre mi hombro? ¿La vez en que acariciaste mis cabellos? Ó cuando me leíste el poema que habías escrito para un hombre que no conoces ( y deseé ser él). Ó cuando me llamaste preocupada porque no encontrabas tus documentos... no, no, no es así. Te amo desde que me dijiste tímidamente tu nombre cuando nos presentaron, desde que llamaste por primera vez por teléfono a saludarme; desde que... desde el principio de mis días te he amado. Por los siglos y los siglos, amén. Te amo, te amé, te amaría; en todos los tiempos verbales lo haría. Con condicionales, sin condiciones. Con tus pretéritos... y tus adjetivos. You, my only one, mi inmortal… no sé como llamarte Clara. Clara... una palabra, música para mis tímpanos... Clara, una mañana clara... Clara... y un corazón que ya no es oscuro... un hombre que ha cambiado su vida... ahora giro entorno a ti... a tu mundo, Clara... my only one... only you... my darling you... you... tú... Clara.
(7 segundos)
Sí... tu amor me ha inspirado para muchas cosas ¿Lo has notado ya, acaso? ¿Has percibido que he cambiado? Te alegra... ¿Cierto? Te alegra que me comporte diferente... que no sea el mismo... que ría más fácil –ahora- con los pequeños detalles que tienes conmigo. Vaya... me sonrojo de pensar esto... siempre fui tan frío, tan silente, tan introvertido... y hoy sonrío con cada vuelta que da el planeta... suspiro... y me alegro creer que puedes amarme... fijarte en mí... que lo nuestro puede ser posible, certero, verdadero... dos corazones juntos y un solo destino. No existirá el pasado, será un nuevo comienzo, nada será como antes...
Lo único triste es que no lo sabes... que no soy capaz de decírtelo. Te llamaba para eso... pero me he arrepentido de hablarte... continuaré solo, por un mundo, vagando.
¿Aló? ¿Quién es? ¿Por qué no habla?
(8 segundos, se escucha un suspiro)
¿Aló?
¡CLIC!
¿Aló? ¿Aló?
Estaré solo por la eternidad...
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