Hoy salí a caminar, caminé por los parques llenos de pájaros y sin gente, por las calles llenas de transito, pero sin autos, disfruté del paisaje amateur del amanecer. Que loco, nunca estuve tan solo como hoy en el recorrido.
Hace años me encontraba sólido con mi estatus. Sonrreía todo el tiempo y a toda persona, no me importaba que hacía en mis horas de ocio, no tenía problemas de alimentacíon, me sentía alegre y todos me mostraban su cara de aceptacón. Pero ayer pasó algo, un suceso feo, de los que devería olvidar para no recordar lo que hice.
Opté por encarar la vida solo, ya no eran necesarios mis compañeros, ya no eran necesarios los horarios de ir a dormir, ya ni siquiera necesitaba de mi familia. Solo necesitaba mis libros, mis pensamientos, mis ocurrencias para volar por cualquier lugar.
Pero nunca supe adaptarme al estilo, yo lo sentía de corazón y por alguna razón lo odiaba. Era de mucha importancia para mi hablar, reirme, hacer reir a mis AMIGOS.
No supe hasta ayer que los necesitaba, que una energía me atraía hacia ustedes amigos. Me doy cuenta que cambiar objetos por personas, cambiar ojos por hojas, cambiar opiniones por pensamientos no es bueno, se deben armar en un todo, y este todo se arma con amistad.
Nunca me di cuenta cuanto me gusta ver reir a las personas y me lo voy a reprochar por mucho tiempo. |