Sobre el blanco metal frío
escurre el rojo tibio.
Las manos tomadas
soportando el equilibrio.
Un cuerpo aturdido
que se niega
a continuar erguido.
Un grito ahogado de auxilio.
Un sueño placentero interrumpido.
Abierto a una puerta,
abierto a un cuadro
de rojo escalofrío.
Vientre que se colapsa.
Corazón partido.
Crujido de amor que escapa
como susurro no oído.
¿Qué tienes amor?
¿Qué pasó contigo?
¿Qué le has hecho a la maldad
para que se ensañe contigo?
Descansa mi amor.
Descansa conmigo.
No puedo borrar lo que pasó,
pero puedo darte mi abrigo.
Déjame pintar mi ropa
de rojo vivo.
Déjame abrazarte
con los brazos extendidos.
Déjame desangrar mi corazón.
Déjame ser tu alivio.
Déjame llorar contigo.
Ven a dormir conmigo.
Texto agregado el 07-07-2025, y leído por 23
visitantes. (1 voto)