TU COMUNIDAD DE CUENTOS EN INTERNET
Noticias Foro Mesa Azul

Inicio / Cuenteros Locales / ome / Los cuatro amigos.

[C:622503]

Los cuatro amigos.

En el año mil novecientos ochenta, cuatro nuevos alumnos de cinco años entraban por primera vez al jardín de infantes.
Fue como si se conocieran de épocas pasadas, eran tan chicos que no era posible que se hubieran conocido en esta vida debido a que eran niños huérfanos por decirlo de alguna manera, aunque algún padre viviera y jamás se habían visto, pero desde ese mismo día algo los unió y se convirtieron en los mejores amigos.
Manuel era un niño que fue adoptado apenas nació, su madre murió en el parto y su padre no pudo mantenerlo y se fue para no volver.
Jacinto tenía a sus padres vivos, pero eran tan pobres que teniendo cuatro hijos más, lo entregaron apenas nació a unos amigos o más bien conocidos que se comprometieron a cuidarlo.
Beto era un niño africano que fue encontrado en la puerta de una iglesia y cuidado por monjas. Se saben sus datos porque alguien dejó un papel precario con nombre, fecha de nacimiento y origen.
Patricio, el rebelde como solían llamarlo, no tenía padres ya que un accidente terminó con sus vidas y al no tener más familia el Consejo del Niño se encargó de cuidarlo.
Eran como hermanos, se sentaban juntos y se cuidaban a pesar de su corta edad, debido a que por el hecho de no tener o no vivir con sus padres, muchas veces eran menospreciados por los demás padres y hasta por sus compañeritos que al escuchar lo que decían en sus casas comenzaron a dejarlos de lado. Lo bueno es que a ellos no les importaba, mientras no los separaran.
La maestra, una joven simpática notó aquel acercamiento de los niños y comenzó a incentivarlos a que siempre fueran así, amigos para siempre y lo que se aprende a esa edad no es fácil olvidar.
Los años fueron pasando y gracias a la maestra que conocía a personas importantes dentro de la escuela, pudo mantenerlos juntos en todas las clases, tanto así que si alguno enfermaba los otros se sentían perdidos sin él.
Estos cuatro amigos eran conocidos en toda la escuela, los llamaban los cuatro de oro, quizá porque estos chicos eran brillantes, jamás repitieron y era muy difícil que faltaran a la escuela.
Y al fin llegó la época del liceo, con notas brillantes los cuatro amigos comenzaron una nueva etapa en sus vidas.
Los seis años pasaron volando, siempre compartiendo todo, pero llegó el día que se enamoraron y las cosas cambiaron, ya no se veían tanto y a pesar de seguir siendo amigos, y aunque se extrañaban, el amor fue más fuerte. Además, cada uno siguió una carrera diferente, Manuel con aquel porte militar que siempre lo destacó se enroló en el ejército, su mayor deseo era llegar a general.
Jacinto, el enamoradizo era el más despistado, aunque muy inteligente estudió literatura, siempre con sus poemas que encantaban a las muchachas.
Beto llegó a ser médico y según decía su mayor anhelo era poder viajar a Africa donde quizá llegara a conocer a algún pariente y fue así que con su título en mano se unió a los médicos sin frontera hasta llegar al continente africano y ayudar a los habitantes del lugar.
Patricio, el intelectual fue abogado.
Cuando se encontraban alguna que otra vez luego de ser mayores, con la joven maestra de jardinera, que ahora se había convertido en abuela, aquello era algo increíble, a pesar de la diferencia de edad, ella era una más entre ellos, así se querían los cinco y Julia, la maestra, no se cansaba de pensar que a pesar de los muchos contratiempos que aquellos niños habían tenido en sus vidas y lo mucho que lucharon para llegar a ser lo que eran, jamás no solo no se hubieran olvidado de ella, sino que aquella amistad perdurara toda la vida.
Pero la vida suele ser cruel y el primero en irse fue Beto, no pudo con las enfermedades que pensaba curar y la muerte se lo llevó siendo aún muy joven.
La desolación se instaló en los corazones de todos, la vida no había sido justa con él y todos lo lloraban.
A los pocos meses Manuel que ya se había casado y tenía una hermosa familia dejó de existir debido a que un compañero, limpiando el arma de reglamento disparó sin querer y a pesar de que nadie pensaba que era tan grave, no pudo soportar la operación y se fue de este mundo a reunirse con su amigo Beto.
Aquello parecía increíble, Jacinto y Patricio comenzaron a sentir miedo, no era normal que dos de ellos hubieran muerto tan jóvenes, algo no estaba bien y a pesar del dolor que sentían, comenzaron a reunirse los dos y algunas veces con Julia a recordar a sus amigos.
En una de esas reuniones, quisieron probar algo que quizá a muchos les parezca ridículo, pero que a ellos en ese momento tan doloroso se les ocurrió.
Patricio tenía una casa muy bonita, vivía solo y a pesar de tener novia, esta no vivía aún con él y fue así que se le ocurrió traer una médium muy conocida e invitar a Julia para que los acompañara en la reunión.
Allí estaban un sábado los tres cuando llegó la médium.
Esta era una mujer normal, vestida con un traje con chaqueta y una blusa de seda, lo que llamó la atención de los presentes que pensaban encontrarse con una mujer de vestimenta diferente, algo más estrafalario por lo menos eso era lo que ellos pensaban de cómo sería una médium.
La mujer se presentó y se sentaron alrededor de una mesa.
Claudia, ese era el nombre de la médium les hablo primero diciéndoles que nada era seguro, que a veces los espíritus aparecían y otras no, que todo era cuestión de tener paciencia.
Los amigos y Julia, se miraron y a pesar de la tristeza que sentían, los tres sonrieron a lo que la médium les pidió que no se apuraran y que confiaran.
Unos quince minutos pasaron cuando una luz muy tenue, al principio, se podía ver en un rincón de la habitación.
El nerviosismo se aceleró entre ellos debido a que aquello no podía ser un truco ya que Claudia jamás había estado en esa casa y no hubiera tenido tiempo de hacerlo.
La mujer con los ojos cerrados les dijo que eso que veían era el espíritu de alguien que aún no se había dado a conocer.
De pronto en el otro extremo de la habitación otra luz apareció, esta con más forma humana, aunque aún sin definir.
Aquello sí que asustó a todos, hasta la médium estaba asustada ya que nunca le había pasado que dos espectros aparecieran juntos y así les dijo.
Julia fue la primera en darse cuenta que, a pesar de haber invocado a los amigos muertos, aquellos dos seres no eran ellos.
De pronto Claudia se levantó y les dijo que no podía seguir con lo que estaba haciendo, esas luces no eran ni Beto ni Manuel, ellos eran almas buenas y esas luces no lo eran y sin darles tiempo a nada salió corriendo de la casa.
Pero, las luces a pesar de que Claudia ya no estaba, siguieron allí y de pronto otras se sumaron, Jacinto y Patricio quisieron levantarse de las sillas y abandonar el lugar, pero algo invisible los retuvo. Nadie sabía qué hacer el horror se apoderó de ellos cuando de pronto algo mucho más fuerte que aquellas luces, se presentó ante ellos ahora con imágenes conocidas para ellos, Manuel y Beto no podían abandonarlos y de pronto las luces se fueron apagando, quedando solamente la de los amigos muertos que con voces que no eran más que pensamientos les daban las gracias por querer contactarse con ellos, pero que aún no había llegado sus horas, que vivieran sus vidas que dentro de mucho tiempo se volverían a encontrar y se marcharon para no volver jamás.
El tiempo pasó, pero la amistad que los unió, de pequeños, como ellos mismos se habían prometido, jamás se olvidó, el destino dirá cuándo se volverán a reunir y así siguieron sus vidas sabiendo que cada uno tiene su propio destino y que a Beto y a Manuel algún día los volverían a ver.

Omenia
16/4/2025





Texto agregado el 18-04-2025, y leído por 47 visitantes. (3 votos)


Lectores Opinan
20-04-2025 Sî, querida Ome, tiene razón Vicente. Muchas de tus tramas dan para novelas, para mucho más que un cuento. Tienes imaginación y todo a tu disposición para eso. Abrazote! MujerDiosa_siempre
19-04-2025 —Desde mi punto de vista leo y pienso que, tomando en cuenta trama y cantidad de personajes, podría desarrollarse como una vovela corta o lo que en francés se denomina nouvelle. —Creo que el tema bien valdría intentarlo y desarrollarlo. —Un abrazo. vicenterreramarquez
19-04-2025 Tus historias son largas, pero al leerlas, se me hacen cortas. Sin duda se debe a la magia de tu prosa, o, también imbocas espíritus de los grandes escritores? Abrazo amiga Ome y duerme lindo. sendero
 
Para escribir comentarios debes ingresar a la Comunidad: Login


[ Privacidad | Términos y Condiciones | Reglamento | Contacto | Equipo | Preguntas Frecuentes | Haz tu aporte! ]