Estoy seguro; no lo sé todo, todo lo que debería saber,
lecciones de una vida vivida en entrelíneas defensivas,
en la dudosa retaguardia de una salvaguarda protectora
agazapado en la conveniencia de una celebrada ignorancia,
en la desaconsejada omisión de ese silencio acusador,
tiempo que se tornó histórico con mi ausencia presente,
en una memoria, en aquel retrato que olvidó mi imagen,
yo nunca estuve en todos aquellos momentos detenidos celebrados por la historia fijada de lapidarios precisos,
no me adelanté, no grité las proclamas de insurrección,
y ataviado estuve con la más inocua de las ideologías,
acomodado trás la barrera de ajenas conspiratorias ideas,
herencia de un prudente dogmatismo transformador,
cuando mirar al otro lado es la más pragmática solución,
y ahí me quedé yo toda la vida sin ver la banda pasar,
imbuido en una absurda míngua intelectual consentida
que nunca me vá a dejar completar mi propio retrato.

JIJCL, 13 de abril de 2025