TU COMUNIDAD DE CUENTOS EN INTERNET
Noticias Foro Mesa Azul

Inicio / Cuenteros Locales / ome / Historia de un gran amor.

[C:621872]

Historia de un gran amor.

Las luces de neón encendían las calles de la gran metrópolis, aquello era un mundo aparte para los que allí se encontraran.
Ir y venir de un lado hacia otro visitando bares, cines, teatros y compartiendo con amigos la alegría de estar juntos, así se sentían Guillermo y Romina, una pareja de muchachitos jóvenes y alocados que vivían el momento creyendo que el tiempo no existía ni existiría jamás para ellos, la juventud egoísta no suele pensar que algún día se alejará para no volver.
Se querían, con ese amor de juventud, ardiente e impetuoso, pero que también podía ser cariñoso al punto de que con sólo mirarse a los ojos lograra comprender cada uno lo que el otro deseaba.
Guillermo y Romina!! Los amigos lo sabían, ellos habían nacido para estar juntos, unidos por lazos que ni el tiempo rompería y así llegó el casamiento y más tarde, los hijos y …
La vida también a ellos les llegó, los años fueron pasando y destruyendo aquella hermosa juventud hasta que sus miradas ya no eran compartidas, poco a poco los hijos también se fueron y aquella realidad los lastimaba. A veces la soledad no es buena compañía porque a pesar de estar juntos la llama del amor parecía haberse extinguido.
Romina no lograba mirarse al espejo y cuando lo hacía era tal el temor que sentía que cada día se iba hundiendo más y más en la ciénaga de sus pensamientos sin intentar por lo menos tratar de volver a ser, no la hermosa mujer que había sido, sino la hermosa mujer que sería si se lo propusiera.
Veía como Guillermo de reojo solía mirarla y quedar pensativo, pensando quizá que era hora de terminar con aquella farsa, la de soportarse mutuamente.
Pero un día por una razón que ya ni recordaba, volvió a mirarse al espejo y no tuvo aquella sensación de amargura, una amiga la había invitado a ir a tomar el té a su casa y a pesar de que nunca salía, lo hizo.
La casa de su amiga estaba en el centro y Romina al no saber manejar tuvo que tomar un taxi ya que ellos vivían bastante alejados.
Al llegar, su amiga Claudia la recibió en un apartamento moderno y elegante que Romina hubiera querido tener, pero que la plata nunca alcanzaba y tuvieron que seguir viviendo en la casita de la playa.
Guillermo por su parte ya no quería salir, era más cómodo estar viendo la televisión que andar caminando por ahí.
Claudia al ver a su antigua amiga sintió lástima por ella, el brillo de sus ojos verdes, se había apagado y aunque aún era bonita la dejadez y la falta de arreglo en sí misma la habían llevado a sentirse vieja, gastada y difícilmente querida. Eso era lo que pensaba Romina.
La charla era amena, tenían tantas cosas para contarse, habían pasado años sin verse y cuando por casualidad, Claudia la vio en el supermercado la invitó a tomar el té, como solían hacerlo cuando eran solteras.
Guillermo al ver que Romina demoraba se sintió solo y decidió salir, la tarde de sábado era hermosa y pensaba que hacía mucho tiempo que no notaba el aire fresco en el rostro, ni veía los jardines florecidos en primavera y se sintió diferente, hasta llegó a pensar que la juventud había vuelto y caminó y caminó hasta llegar al centro de la ciudad cuando las luces comenzaban a encenderse y el bullicio de la gente llegaba a sus oídos, no como algo molesto sino todo lo contrario, recordó las veces que había recorrido aquellas calles junto a Romina…
Romina… ¿Qué les había pasado?!! Pensaba Guillermo con tristeza.
Mientras Romina junto a su amiga se hacían confesiones. Claudia era viuda y sin hijos, pero parecía tener todo lo que le faltaba a ella.
Al fin, Claudia leyendo los pensamientos de su amiga le dijo que estaba segura que sabía lo que estaba pensando a lo que Romina le contestó con un cierto rubor en el rostro que lo dudaba.
Claudia trajo entonces, una fotografía de cuando eran unas muchachas, cada cual con su pareja y se la mostró a su amiga.
Romina sintió que aquella sí era vida, lo tenían todo, juventud, belleza y amor.
----Sé lo que estás pensado Romina, que todo se termina en la vida, pero creo que estás muy equivocada, aquella época va a quedar por siempre en nuestros corazones, aunque todo haya cambiado.
----No lo sé Claudia, mírame, ya no tengo nada, tú en cambio está casi igual, no lo puedo entender.
----Tú puedes volver a ser la que fuiste, es sólo que no sabes ni te atreves, pero yo haré que vuelvas a sentirte como antes. Y sin mediar palabras Claudia la invitó a ir a un lugar con ella.
Claudia llevó a Romina a una peluquería sin que su amiga supiera a donde iban, habló con la empleada y a pesar de que la peluquería estaba llena, fue la primera en ser atendida, algo que Romina no entendía.
----No te preocupes, este es mi regalo por los años de juventud que vivimos y disfrutamos, soy la propietaria de este salón de belleza y en cuanto te vi supe que tenía que traerte y devolverte algo que dejaste caer por el camino, tu autoestima.
Luego de un par de horas la peluquera le muestra a Romina algo que jamás creyó que vería otra vez, una mujer diferente, joven aún y con un brillo nuevo en sus ojos, eso fue lo que vio en el espejo, el cambio era lo único que le faltaba.
Al volver a su casa, Romina se cambió de ropa siguiendo el consejo de su amiga, volvió a usar aquellos pantalones ajustados y aquella blusa de seda que tanto le gustaba a Guillermo y que, a pesar de los años, aún estaba nueva por falta de uso y se sentó a esperarlo. No sabía que estaba esperando, ni siquiera si su esposo lo notaría, hacía tanto tiempo que ni la miraba.
Guillermo al entrar a su casa sintió que su corazón latía más fuerte que nunca, creía estar viendo a la antigua Romina y… esa fue la noche más feliz de sus vidas. El amor no se había ido, simplemente había que despertarlo.
Omenia
14/1/2025
Sé que ---- no es lo que va en el escrito, pero mi máquina no me permite por alguna razón usar el correcto. Gracias por leerlo.

Texto agregado el 16-01-2025, y leído por 37 visitantes. (6 votos)


Lectores Opinan
18-01-2025 Bien por la amiga, la regreso a la vida. tete
17-01-2025 Fiel a tu prosa que envuelve, se lee la prosa con interés y seducción. El amor no se va, solo se guarda, bello pensamiento querida Ome. Abrazo grande. sendero
16-01-2025 —Quedo pensando que aunque la preocupación de Claudia por devolverle a Romina su auto estima tuvo el efecto esperado, también mucho contribuyó a lo que esa noche fuera lo que fue, el paseo que realizó Guillermo. Dado que, lo que vio y sintió por esas calles le revivieron los bríos dormidos. —Un abrazo... y me olvidaba decirte que me gustó el final, un poco diferente a lo que siempre leo en tus historias de vida. vicenterreramarquez
16-01-2025 2. y en virtud de la anterior, llegar a un final feliz. Una historia hermosa, totalmente disfrutable. Gracias. gsap
16-01-2025 1. El relato se lee con fluidez debido a la narrativa amistosa que es tu sello. Me encantan tus historias, resulta fácil con las descripciones que brindas, poder imaginar cada uno de los sucesos y modificarlos conforme se avanza en su lectura. En cuanto al desenlace, destaco la sincronía que se da entre los protagonistas, ya que es aquello lo que permite que se puedan reencontrar gsap
16-01-2025 Hermoso cuento y más cierto de lo que parece. musas-muertas
16-01-2025 Una hermosa historia, Ome. Un amor verdadero que solo estaba dormido. Me encantó tu cuento. maparo55
 
Para escribir comentarios debes ingresar a la Comunidad: Login


[ Privacidad | Términos y Condiciones | Reglamento | Contacto | Equipo | Preguntas Frecuentes | Haz tu aporte! ]