Sensaciones permitidas las de ahora; las de darme libertad y no ahogarme, para siempre, en las vanaglorias de un supuesto pasado. ¡Qué lamento más grande es el dejarse estar dominado por la asfixia! Qué augurio más positivo vivir con ganas de ansia, con ganas de todo, entregado. Ahora, a digerir.
Texto agregado el 24-12-2024, y leído por 33 visitantes. (1 voto)