Solo cuando me perdiste
me diste el justo valor
que debiste darme
cuando me tenías a tu alcance.

Mi amor valía una fortuna
tú creíste que valía tres pesos
que se podía encontrar
a la vuelta de la esquina.

A mí me gusta la mujer
que despierte mis gaas de pintar
mi locura en su piel suave y me ayude
a conquistar el mundo con arte.

Yo quiero una mujer
que además de ser mi esposa
sea también mi musa
que me de poesía, amor y sorpresas.

Yo no necesito una mujer
que no sepa dary sabe solo pedir,
yo prefiero una mujer de armas tomar
capaz de pelear por mí.

Mejor que te fuiste
no tenías cómo quedarte
creíste que vivir con un artista es fácil
vivir con un artista es bien difícil.

Yo sin ti sobrevivo
en cualquier parte,
tú sin mí no sobrevives
ni siquiera en tu casa.

Pedro Moreno Mora