SILENCIOS
Hay tantos silencios como estrellas en el firmamento:
Silencios tímidos,
silencios callados
y silencios estruendosos.
Silencios sin tapujos y sin preámbulo.
Silencios condicionados y predeterminados.
Silencios inconfesables, secretos.
Silencios comunes y corrientes.
Silencios oblicuos, tangentes y perpendiculares.
Silencios unidimensionales,
bidimensionales y tridimensionales.
Silencios cómicos, trágicos y teatrales.
Silencios compasivos, tolerantes.
Silencios serios, con argumento.
Silencios para pensar.
Silencios para llorar.
Silencios para recordar.
Silencios para olvidar.
Silencios con repertorio y por catálogo.
Silencios con lágrimas y suspiros.
Silencios decorosos, originales.
Silencios a la medida.
Silencios dudosos y poco creíbles.
Silencios profundos y melancólicos.
Silencios con anuncios de colores.
Silencios sin partitura, improvisados.
Silencios cándidos, enternecedores.
Silencios serios, comprometidos.
Silencios insultantes, lacerantes.
Silencios indefinidos e inconstantes.
Silencios moribundos.
Silencios sobrecogedores.
Silencios desgarradores.
Silencios cargados de palabras.
Silencios ambiguos: de amor y odio.
Silencios sin principio ni final.
Silencios encadenados, prisioneros, torturados.
Silencios agolpados, amontonados, agrupados.
Silencios moribundos, agonizantes, flagelados.
Silencios solitarios, desterrados, fugitivos.
Silencios del amor, de la vida y de la muerte
Silencios viscerales y del alma.
Silencios y más silencios...
Silencios como el mío que sólo tú y nadie más conoce.
Cajicá, agosto 15 de 2024. Hora: 3:16 a.m
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