Si quieres irte

no voy a cerrarte la puerta

la abriré de par en par

para que te vayas ya mismo.

Para qué diablos voy a detener a una mujer

que no quiere estar más conmigo

no sirves ni siquiera para amiga

menos para esposa cariñosa.

Por la misma puerta que saldrás

entrará otra mujer a mi vida

yo le daré la bienvenida

con poesía, besos, abrazos y caricias.

Tú no entendías mis versos

eras muy basta y testaruda

a ti te faltaba intuición

para adelantarte a las cosas.

Con ella, si es necesario

adelantaremos los días

afanaremos a las noches frías

para que se vayan bien pronto.

Presiento que esa mujer

con la que sueño a diario

ya viene rauda por el camino

a amarme sin dudas y a tomar vino.

Con ella brindaremos por tu partida

estabas ocupando el espacio de ella

no tengo motivos para llorar

ni heridas que ella deba cerrar.

Pedro Moreno Mora