El cuerpo se torna fino y transparente su fatiga embolsa, años de energía y vacilación. Se escurre su piel reacia al ayer se torna visible su invierno, camino irremediable. Salvemos la ignorancia no te creas culpable si el hombre no remedia Lo que hoy es incurable. Recapacitar de la frustración porque la hipocresía y el cinismo son dos máscaras sin consuelo El tiempo se asila en su dermis y va cautivando su sediento ardor, mientras caen los velos en la intemperie late un corazón desnudo ante Dios. A-M-R
Texto agregado el 26-03-2024, y leído por 88 visitantes. (2 votos)