Si supieras las penas y tristezas que anidan mi alma
me extenderías las manos y me ayudarías a superarlas.
Me levanto y convivo con ellas.
Pero no me agrada la lástima y estoy esperando
la cuerda para asirme de ella.
Es tan oscuro y ni un rayo de luz se filtra en ella.
No la elegí ni siquiera imaginé lo que el destino
me deparara.
Tal vez cuando llegue el momento de la despedida
alguien se apiade y cure mis heridas y cubra mis despojos
con blancas y frescas margaritas
Texto agregado el 16-11-2023, y leído por 129
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Lectores Opinan
25-01-2024
Me gusta como generas un vacío unísono al terminar cada línea propoeta
22-12-2023
hace poco falleció una amiga de la infancia, me dejo huérfana de miradas cómplices. Cada vez que nos reencontrábamos llorábamos abrazadas a aquel pasado que fue. gracias! Martilu
"es tan oscuro y ni un rayo de luz se filtra en ella". Baya si conocemos el dolor y la perdida. Somos seres humanos. Antes o después sufriremos. Nadie está exento. El poema nos recuerda nuestra humanidad. A través de sus letras, nos sumerge en el dolor, pero también en la esperanza. "alguien se apiade". ¡Claro que sí! Los golpes de la vida no serán tan duros que NO nos permita levantarnos. EXCELENTE. 5* dfabro
06-12-2023
Versos tristes que darán paso a un rayo de sol, porque la vida es un regalo de la naturaleza. Hasta en el infierno terrenal hay rinconcitos de alegría. remos
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