La lluvia torrencial caía sobre el campo, estábamos mi hermana y yo retozando por el bosque como dos muchachos despreocupados, cuando de pronto el cielo se oscureció, aparecieron las nubes negras, un fuerte viento soplo y el retumbar de los rayos nos hizo correr para buscar un lugar donde protegernos.
Corrimos y corrimos hasta que llegamos a una antigua casona, esta no mostraba ninguna luz en sus ventanas, sin dudarlo fuimos directo hacia la puerta de entrada y para nuestra sorpresa estaba abierta; ya dentro de esta casona pudimos constatar estaba vacía y oscura pero algo le llamó la atención a mi hermana, ella pudo ver que en el fondo del corredor, la puerta que estaba al final de ese corredor se podía apreciar una tenue luz debajo; ella que es siempre muy avezada e intrépida, se dirigió con pasos determinados a ver qué había detrás de aquella puerta, yo que soy, tengo que reconocerlo más prudente por no decir algo cobarde, le dije: -no espera no sabemos quién está ahí-, ella demostrando su valentía, me replica: -si no la abrimos no sabremos que hay ahí dentro.-
Nos acercamos pues hasta la puerta, nos miramos por unos segundos y ella movió la manija lentamente tratando de abrir la puerta y esta al irse abriendo con el crujir de la madera vieja nos dispusimos a entrar, teníamos esa necesidad de ver qué había detrás de esta puerta.
Al entrar con esa tenue luz, podíamos ver solo un pasillo que llevaba a unas escaleras y estas escaleras iban bajando, seguramente nos llevaría al sótano de la casa, a cada paso que dábamos escuchábamos el crujir de la madera, por más que caminábamos con cuidado, en cada paso el ruido de la madera se hacía evidente; ya en la escalera bajando, vimos que las tonalidades de la luz se fueron haciendo más intensas y con otros colores de luces, verdes, celestes, rosadas, moradas, azules se iban intercambiando, queríamos apresurar nuestros pasos para ver qué había al final de estas escaleras, pero el miedo natural a lo desconocido hizo que sigamos bajando lentamente. Conforme nos acercábamos, la luz se hacía más intensa, los colores iban girando, ya queríamos saber qué era lo que podíamos encontrar ahí abajo.
Por fin, al terminar de bajar estábamos, frente a una esfera de luz que cambiaba de colores, giraba lentamente dando los destellos de diferentes, colores como pulsaciones, nos quedamos mirando esa bola de luz anonadados, sin palabras, era algo que nos sobrecogía, pero a la vez nos fascinaba; después de unos minutos de quedarnos embelesados, nos miramos el 1 al otro y dijimos: ¿Qué es esta cosa? Nunca habíamos visto algo parecido, era como salido de una película de ciencia ficción, y lo más extraño era que no producía ni frío ni calor, era solo luz, luces de colores tan hermosos, pero a la vez también, fuimos sintiendo un escalofrío, que nos empezó a correr por la espalda, el instinto de conservación que todos tenemos nos estaba advirtiendo que esto no era bueno.
Mi hermana a pesar de ser tan valiente, pude ver en su rostro una mirada de pánico; este no era el lugar donde podíamos protegernos de la tormenta, más bien sentimos que habíamos caído en una trampa, como cual polilla atraída por la luz que cae en una telaraña.
Siempre mi hermana dirigiendo me dice: -ya vámonos, esto parece peligroso-, pero al tratar de movernos y salir de ahí sentimos que nuestras piernas no nos respondían, estaban como pegadas al piso, el miedo comenzó a apoderarse de nosotros, esto ya no es divertido; nuestra primera reacción ante esto fue empezar a dar gritos pidiendo ayuda, gritamos y gritamos hasta que nos quedamos sin voz, sentíamos que esto iba empeorando, ahora empezamos a ser arrastrados hacia esa bola luminosa, que intensificaba su luz, como si pusiera más fuerza para jalarnos hacia adentro, por más que forcejeábamos y gritábamos no podíamos detenernos, yo solo la mire a mi hermana y…
En las noticias locales, reportamos la desaparición de 2 jóvenes adolescentes Giovanna de 14 años y Eduardo de 16, han desaparecido en el bosque cercano al pueblo, se cree que pudieron estar paseando por los alrededores de la casona abandonada hace más de 100 años; sus padres reportaron el hecho esta mañana, después que no regresaron a casa una vez terminada la tormenta eléctrica de anoche; se teme que hayan sido secuestrados, las autoridades continúan su búsqueda de los jóvenes desaparecidos. Ahora en el reporte del tiempo para los siguientes días tendremos sol, pero el fin de semana volverá a ser lluvioso y con tormentas eléctricas propias de la temporada de verano, reporto para ustedes… |