Casi de noche hablé a mi madre.
Sabía de antemano que su hijo bien amado no le habló por teléfono sabiendo que hoy se le festejaba.
No valían excusas, ni el parto atendido en un rancho lejano. Era mejor pedirle perdón y cubriendo la distancia fui a verla y se hizo la seria. Yo la abrace y cuando sentí el jalón de orejas, me dije que el perdón no tardaría.
Hoy cumpliría noventa y ocho años y solo le pediría que me diera los jalones de orejas que ella quisiera.
24 de Septiembre día de las Mercedes.
Texto agregado el 24-09-2023, y leído por 187
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Lectores Opinan
27-09-2023
A veces dejamos a las madres en el olvido según ellas,tú no lo viste así porque la recordabas ;pero en verdad eso no sirve.
Ellas quieren atención y te tiraba las orejas porque era la forma de demostrar su dolor.
Pero ahora sabe cuanto la quieres*****
Un beso
Victoria 6236013
25-09-2023
La tuviste mucho tiempo y una madre siempre perdona. Cariños yosoyasi
25-09-2023
Hay pequeños recuerdos de palabras y actos que se atesoran y que luego se añoran pues son la huella que otros dejaron en nuestro vivir. Hermoso relato, me conmovió. Saludos, sheisan
25-09-2023
Una maravilla tener esa mamá, mi querido. Puras bendiciones para ella y su hijo. MujerDiosa_siempre
25-09-2023
Quizá esos tirones de orejas sean los que te convirtieron en lo que ella quería. Las madres perdonan por eso jamás las olvidamos, un abrazo. ome
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