Al final parte 15
Mientras Nuria solucionaba los problemas con su mamá, Israel se enfrentaría a un dolor muy grande. Oscar le llamó de inmediato cuando se enteró de la noticia.
-Amigo, debo decirte algo Oscar pronuncia del otro lado del teléfono.
- ¿Sigues en el trabajo? pregunta Israel.
-Sí. Llevo veinticinco horas en el hospital. Ya en una hora salgo. Pero debo decirte que Francis está embarazada.
- ¿Cómo?
-Así es amigo. Me lo dijo mi mamá. Fue a verla.
- ¿Es tuyo? ¿O de Gabino?
-Siempre usamos preservativo. La última vez que tuvimos sexo yo no estuve con ella, ni tú. Fue Flavio.
-Dudo que sea de él. Bueno y ¿Cómo está ella?
-Bien. Dice mi mamá que no se le nota nada la barriga. Pero como la prueba salió positiva, tenía un retraso de tres meses. Ella es regular.
-Entiendo. ¿Piensas ir a verla?
-No lo sé responde Oscar.
Israel visitó a la futura mamá. Quería verla y aclarar algunas cosas.
-Me sorprendió cuando te vi aquí le dijo Francis.
- ¿Cómo te va?
-Pues
han sido meses terribles. De incertidumbre. Caí. Fui una tonta. Me dejé llevar por mi obsesión de querer más.
- ¿Por qué no nos dijiste que ya no estabas a gusto con el espectáculo? le cuestiona Israel.
-No sé. La verdad es que yo veía las cosas distintas. Flavio estaba enamorado de ti, mientras que Oscar ya no me miraba como antes. Oscar y tú están conectados desde hace mucho. Él no te es indiferente.
Israel pensó que la joven tenía toda la razón, pero no lo quería aceptar. Todavía estaba Flavio.
-Hablando de Flavio ¿has hablado con él? ¿está en Suiza?
-No me responde el teléfono. Me manda al buzón de voz.
- ¿No se te hace raro? Para lograr llegar hasta allá hay que tener muchos años de experiencia. Honestamente no creo que haya sido eso.
- ¿Crees que me mintió?
-Me parece que sí.
Los dos jóvenes se despidieron. Mientras Israel se agachaba a tocar la poca barriga que Francis tenía, pensaba en lo que ella le había dicho de Flavio.
El hombre no se quedaría con la duda. Recordaba que Clara su abuela evitaba ir a la casa. Ya no los visitaba con la misma frecuencia. Héctor tampoco hacía acto de presencia. Algo andaba mal.
Le dio una visita al departamento en el que vivía Flavio, ahí se encontró con un vecino que le dio información importante.
- ¡Qué bueno que lo veo! le dijo el vecino el papá del doctor vino la semana pasada y tiró este medicamento. Supongo que es muy importante.
Israel lo tomó y agradeció la información. Sabía que esa cajita es de un medicamento para insuficiencia cardiaca.
Israel entró al departamento y se dio cuenta que algunas cosas de Flavio no estaban. En ese momento escuchó ruido, era Héctor.
Los dos doctores no se encontraron en el departamento. Israel lo siguió. Héctor se dirigió al departamento que compró cuando se casó con la abuela de Israel. El joven médico, entró al estacionamiento y se estacionó lo más lejos que pudo del automóvil de Héctor. Lo siguió, subió al quinto piso y ahí fue cuando todo se rompió.
Israel tocó a la puerta y abrió su abuela.
- ¡Israel! gritó la mujer de edad.
-Abuela Israel respondió serio.
- ¿Qué haces aquí? preguntó ella muy nerviosa.
-Lo mismo pregunto yo ¿Qué haces aquí?
El hombre pasó al departamento. Olió esa loción que solamente Flavio usaba.
- ¿Qué está pasando aquí? -Israel preguntó.
Héctor de inmediato salió del cuarto y lo vio en la sala.
-Israel.
Israel entró al cuarto y lo vio tendido en la cama. Los ojos se le inundaron de lágrimas al verlo tan delgado e indefenso.
-Pero ¡mi amor! ¡qué te pasó! Israel expresó.
El hombre se acercó al moribundo que ya no tenía energía para nada. Se hincó y tomó su mano.
-Mi amor ¿Qué tienes? dijo Israel sin recibir respuesta.
Flavio lo miró de sorpresa, pero cansado.
-Te amo dijo Israel.
Israel se puso de pie y salieron del departamento para pasar a que le dieran una explicación.
- ¡Exijo una explicación! dijo Israel bastante molesto.
-Israel. Entiende. Fue decisión de él. Flavio no quería estar en un hospital Héctor le explica a Israel.
- ¿Tú? dirigiéndose a su abuela - Eres mi abuela ¡Me mentiste! ¿Cómo pudiste?
-Hijo dijo Clara llorando cuando Flavio nos dijo su plan ninguno de los dos estuvimos de acuerdo con él. Tu tenías que estar aquí con él.
-Flavio dijo que tú ya tenías muchos problemas en tu vida y no quería ser uno más. Por eso inventó lo del hospital le aclaró Héctor si quieres ódiame. Pero no odies ni a Clara ni a Flavio, ellos no lo merecen Héctor quiso enfrentar la culpa completa.
- ¡Por Dios! No te hagas la víctima. Necesita un médico ¡Un hospital!
-No. El diagnóstico es definitivo. Es terminal. Tiene insuficiencia cardiaca congestiva.
- ¿Cuánto lleva así?
-Dos meses y medio.
Israel acompañó a Flavio en su cuarto. Se acercó a él y le dio un beso en la frente. Se tenía que hacer la idea de que pronto se apagarían esos ojos verdes.
Israel llamó a su mamá. Nuria se mostró respetuosa en todo momento. Le ofreció su ayuda y su apoyo moral. Le pidió que llamara a Oscar y le avisara. Él ya no podía hablar.
Oscar llegó al departamento, lo vio en la cama. Una tristeza se apoderó del futuro geriatra. Oscar se acercó a él, se sentó en la cama. Le soltó esa coqueta sonrisa y se acercó a él para decirle;
-Estarás bien, amigo refiriéndose a que pronto dejará de sufrir.
Oscar e Israel hablaron en el pasillo sobre la situación de Flavio.
- ¿Cómo lo supiste? Me llamó tu mamá.
Israel le dijo que siguió a Héctor desde el departamento de Flavio hasta el lugar en el que se encontraban. Y ahí fue donde lo vio.
- ¿Sabes que no hay nada que hacer médicamente por él? le aclaró Oscar.
-No me digas eso.
-Lo sabes. El tiempo es poco exacto, pero no es mucho Oscar se sinceró.
Israel se quedó en el departamento. No quería separarse de su todavía novio. Oscar dijo que llamaría para saber el estado de su amigo mientras que antes de irse le dijo un par de cosas a Héctor.
-Siempre pensé que eras un cabrón, pero no que llegaras tan lejos le dijo Oscar a Héctor en la puerta.
Continuará
|