Arantes, odiaba su nombre, pero su padre así rindió tributo al Rey Pelé.
Arantes aborrecía el fútbol y amaba la literatura. En una velada donde leían a Allan Poe conoció a Ema, quien se convirtió en su esposa. Ella le dio un primogénito, a quien bautizaron como Gabriel, en homenaje, al autor de Cien años de soledad. Por un capricho del destino, el pequeño Gabo detestaba los libros, y un día le dijo a Arantes que quería ser futbolista.
Texto agregado el 14-09-2023, y leído por 78
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Lectores Opinan
14-09-2023
Esto que es? luisgerminalmunozsalvador
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