Era un ser extraño que nunca reía tenía en las manos restos de pasado su mirada turbia posada en la mía me hacía preguntas que siempre he ignorado. Quería saber si estaba perdida si el mundo rodaba por otro camino como una gigante ruleta sin vida o si todavía tenía un destino. Pálida y serena dentro del espejo preguntó si aún vivía su estrella me tendió la mano, habló del fracaso. Hubiera querido darle un simple abrazo decirle que era mi triste reflejo pero solo pude llorar junto a ella.
Texto agregado el 02-08-2023, y leído por 97 visitantes. (4 votos)