A Julio Rodríguez
-profesor y poeta-

Dedicarle al profesor
que destaca por sus libros
como escritor y poeta,
es más trabajo de osado
que halago de quién lo intenta,

como alumno primerizo
ajeno a rimas y estrofas,
es muy probable que embarre
entre ripios y ocurrencias
esta intención, tan honesta

Con movimientos continuos
de recital de lecturas,
pasea ante los alumnos
todo su cuerpo, el talento,
y en la mano una botella

siempre alegre y con mirada
de ave rapaz que escudriña
hasta el vuelo imperceptible
de “mariposa monarca”
que le inspira una novela.
.
El profesor tiene formas
por cómo instruye y envuelve
entre risas, chismes, letras,
desgranando un denso mundo
hablándonos entre iguales

que no compiten, aprenden
a dar sentido a sus sueños
ensimismados, contentos,
olvidando hasta el reloj,
que marca el tiempo de clase

Salvándonos del bostezo
tan corriente a nuestros años,
labor que merece un premio
dándole ¡ritmo! al taller
y ¡excelencia! a quién lo enseña.

¡Un placer!
Con admiración y respeto
Cesar Álvarez /alumno de 2curso