Somos fuertes parte 5
El espectáculo sería repetido varias veces. Ellos conocían cada rincón de sus cuerpos.
Oscar visitó a su mamá en la cárcel, le llevó lo que necesitaba.
-Mi chamaco. Pero mira nada más esa cara tan bella. Estás guapísimo le dijo Cintia.
-Mamá. Quisiera que estuvieras libre Oscar se lamentó al ver a su mamá en esas condiciones.
-Estar aquí encerrada no significa no tener libertad. Aquí terminé una carrera, enseño a leer y escribir a otras compañeras, estoy escribiendo mi autobiografía. Pero, dime ¿Qué tienes?
-Estoy confundido.
- ¿Qué te pasa?
-Mi amigo Israel.
- ¿Todo bien con él?
-Sí. Pero, no te puedo negar que siento cosas por él. Es tan lindo, tan listo, tiene la familia perfecta.
-Estás impresionado con él le dijo su mamá no conozco a ese chico, pero me imagino que es una increíble persona.
-Amo a Francis, es una mujer excepcional, ella cocina delicioso, es maravillosa.
-Pero Israel se me te metió por los ojos y de él estás enamorado. Aclara tus sentimientos por él.
-Ay mamá suspiró Oscar te traje lo que me pediste. Es ropa, algunos libros y dinero. Te juro que pronto tendrás un buen abogado y te sacaré de aquí.
Mientras tanto, Flavio no se quedaría con la duda.
- ¿Qué pasó con la mamá de Oscar? - Flavio le preguntó a su novio.
-La culparon de lavado de dinero y fraude. Oscar no tiene el dinero suficiente para pagar un abogado, al parecer hubo irregularidades en su proceso - responde Israel.
Flavio lo pensó y alzó la bocina.
-Bufete Villagrán, Medina y asociados ¿en qué le puedo ayudar? dijo la secretaria del otro lado de la bocina.
-Hola, soy Flavio Medina, quiero hablar con el abogado Fabricio Medina.
-Claro, joven. Lo voy a comunicar con el licenciado.
Se escuchó una musiquita hasta que el abogado de puso a la bocina.
- ¿Diga?
-Tío, soy Flavio.
- ¡Flavio! ¿Qué pasa? ¿Te peleaste con mi hermano?
-No. Mira, quiero verte para hablar de algo muy importante.
- ¿Hiciste algo?
-No tiene que ver conmigo.
-Está bien. Agenda una cita y te veo aquí.
Fabricio es hermano de Héctor Medina. El abogado es penalista y tiene un bufete con su amigo. Sus casos son los más pesados y rara vez pierden uno. Ellos dicen no defender a maleantes, siempre buscan la justicia.
Fabricio le solicitó los datos completos a su sobrino para poder revisar el expediente. Flavio tuvo que decirle a Oscar lo que pensaba hacer.
Los amigos se vieron en el departamento para hacer el espectáculo esta vez salió los cuatro los amigos consiguieron las mejores posiciones para conseguir tener placer y poder disfrutar. Los besos y las caricias se apoderaron del momento. Las nalgadas, los gemidos y los jadeos no se dejaban de escuchar.
Después de aquel encuentro sexual, se colocaron su ropa de nuevo y se disponían a irse cuando Flavio lo dijo.
-Debo decirles algo Flavio estaba decidido.
- ¿Todo bien? pregunta Israel.
-Tiene que ver con Oscar.
Oscar pensaba que tenía que ver con sus sentimientos hacia Israel.
-Escuché lo que pasó con tu mamá se dirigió hacia Oscar le pregunté a Israel lo que pasó y me tomé la libertad de algo.
-No te entiendo le dice Oscar.
-Talvez te molestes conmigo por tomarme atribuciones que no me corresponden, pero creo que te la debo por todo lo que hizo mi papá.
- ¿A qué te refieres? le pregunta Israel.
-Mi tío es abogado penalista, hablé con él acerca de tu caso y me dijo que necesitaría el número de expediente y el penal en el que se encuentra tu mamá para poder ayudarte.
- ¿De verdad hiciste eso? Oscar preguntó sorprendido.
-¡Guau! exclamó Francis.
-Pero hay algo que debes saber. Mi tío es hermano de mi papá.
-Yo no tengo dinero para pagar eso dijo Oscar.
-No te estoy cobrando. Quiero remediar las cosas Flavio fue sincero.
Continuará
|