Soy tripulante que navega sin rumbo
no sé quién soy, ni adónde voy.
En mis pensamientos me recreo, con un sentimiento en algún planeta.
Soledad no es una palabra existente, y es actual en muchas situaciones.
No es la mía…
Me concierne claramente la situación inestable, que es no saber quién soy.
Me lleno de sorpresa cuando me llaman, alguien asegura que soy yo, no sé si es verdad, no sé dónde buscar ese punto abstracto que desconozco.
Rondan las preguntas en la mente, corren alocadas en su busca, ya que el piso se le nueve como un trampolín, nada hay más negativo, que no entender lo que todos pueden.
Como un río furioso se descuelgan voces, y nada se comprende.
Eso sí, la verdad esta sobresaliente en otras personas, solo que no entiendo la diferencia,
Algunas cosas son intransferibles, como creerte un ser importante, sin ver más allá de tu contenido.
Me despido de mi fantasía, de mi interlocutor, y mi nostalgia, de mi sapiencia, de no saber nada concreto, de mi vulgaridad y descontento.
Quizás nos veremos entre ambas desconocidas, mi yo, mi interior, y mi vergüenza…

A-M-R