Mientras dormís,
camino sobre la orilla de tus ojos,
borde donde me recuesto sobre la comodidad
de todos tus paisajes a los que nunca fui,
hamacandome entre tu infinito y el afuera,
veo tus sueños crecer y decrecer erosionando los
pecados de ayer.
Diástole y sístole
de serenidad pero la eternidad dura poco,
se levantan tus parpados arrojando lo que sobra y otra vez yo en mí costado
de la cama donde siempre
me encontras.
Me mirás con ternura al notar que no hay nada agitado en mi respiración,
como si
la noche y mis pesadillas
hubiesen quedado atrás
junto a la vigilia y
su circulo mortal.
Texto agregado el 28-08-2022, y leído por 97
visitantes. (6 votos)
Lectores Opinan
15-09-2022
¡¡¡Que me gustó!!!
Escribes...Lindo..
//hamacándome entre tu infinito y el afuera,
veo tus sueños crecer y decrecer
erosionando los
pecados de ayer.//*****
Un abrazo
Victoria 6236013