¡Si me arrepiento de algo!?

Sería que nunca nos sacamos una fotografía…

Una fotografía añosa que mirar con aires de melancolía

¡Esas que se rompen y se besan rabiosas!

Si de vez en cuando gana la desesperación…

Fotografías, como cartas que se desgastan, en una caja de zapatos…

Esa captura desafiante, impúdica, secreta,

Innegablemente hermosa y verdadera…

No existe.

Pero tú lo sabes bien, que no hace falta

Que los amantes mueren en la hoguera

Culpables de este revelado

Y resulta inconfesable sentir

que todavía nos muerde el corazón

y la noche en un instante,

cuando en las sombras estás conmigo

y vienes desde lejos soñando otro destino

como la primera vez que fuiste mía…

y yo…

secretamente tuyo.