OPTIMISTA
Por fortuna soy católico apostólico y romano, lo que me hace ser el hijo de Dios por lo que celebro mi buena suerte. Él es generoso y yo estoy de hinojos ante el altar de la hermosa catedral de la Ciudad de México. Sé que no es fin de año para dar gracias por los favores recibidos, pero, considero que cualquier fecha es buena.

Señor, me corrieron del trabajo disque por flojo y desobligado. Nada se mueve sin tu venia, fue tu voluntad y lo acepto.

Señor, mi mujer contraviniendo lo que dijo el padre Coruco de “vivir juntos hasta que la muerte nos separe” me dejò por feo, mujeriego y por falta de “money”. Fue tu voluntad y lo acepto.

Señor, me acusaron falsamente de acoso sexual y bien sabes que fue un piropo sano, además estaba bien buenota la mujer. Por un pelo me salvé, aunque recibí una mentada de madre de la dama. Fue tu voluntad y lo acepto.

Señor, al pasar por la cantina “La suerte loca”, dos borrachos desgraciados, al verme le dijo uno al otro: “a este cabròn por feo hay que madrearlo”, me han puesto una chinga de órdago que me tuvieron que llevar a la Cruz Roja, donde me hicieron esperar mucho tiempo. Fue tu voluntad y lo acepto.

Señor, vengo humildemente a suplicarte, que tu voluntad agarre a otro pendejo.