Nuestra familia parte 24

Después de salir de trabajar, Nuria le dice a Emilio que al hotel entró a trabajar un hombre muy extraño como policía. No le daba nada de confianza.
Nuria prefiere evitar a ese hombre. Es un señor de nombre Evaristo, que ve a las mujeres con lujuria. Por la noche, Jacinta estaba en el cuarto de lavado y no podía escuchar nada. Evaristo se tocaba los genitales cada vez que miraba a Nuria, tenía toda la intención de abusar de ella.
Buscando a Jacinta, Nuria subió a los cuartos y se encontró con él.
- ¿A dónde tan a prisa? – preguntó el hombre.
-Déjame en paz.
-Ven acá mamacita, tú me vas a hacer lo que yo te diga. Estás buenísima.
- ¡Déjame! – gritó Nuria.
La tomó del cabello para aventarla a la cama.
-Ven acá perra, hoy serás mía.
Nuria forcejeó con el hombre, le pegó en la entre pierna y se logró zafar. En la parte de arriba, ninguna de las habitaciones se ocupa porque son las suites y son más caras. Nadie podía escucharla. Evaristo entró al último cuarto y ahí con todas sus fuerzas, el tipo la despojó de su ropa para abusar de ella. Quince minutos después, Nuria le llamó a Clara para decirle lo que había pasado. La mujer fue por su nuera para ayudarla a salir del hotel, lugar al que nunca regresó.
Clara le rogaba que le dijera lo que le había pasado en el hotel, pero era demasiado vergonzoso para ella y que Emilio podría hacer justicia por su propia mano y prefería dejarlo por la paz, aunque eso marcaría su vida por siempre.

Continuará…