Deshojo la espera en él, y una pregunta muda se incrusta en mi parpado. Decidí por esta vez dejarlo todo en manos de la clarividencia. En sus dedos La noche es una moneda con la misma cara: No está, No va a venir.
Texto agregado el 01-05-2022, y leído por 100 visitantes. (3 votos)