La lectura me envolvía como torrente.
Cuando se convirtió en goteo
me enfrasqué en la música.
Ella me empuja por túneles luminosos
por cavernas con paredes de vidrio.
Lo veo todo en ese hilo transparente que me entreteje en su telaraña y me deja prisionera entregándome al sueño.
Floto en aguas dulces con movimientos de medusa
y cuando toco la superficie del despertar
quiero introducirme en su vida
en sus pensamientos.
Cuando está
soy feliz:
He cazado al ausente
al que huye.
Lo rescato de su antiguo tiempo y me aferro a él
me siento sostenida mientras la música diluvia.
Luego como un pájaro
se sube a la rama de un árbol
lo persigo
esa leve sacudida lo impulsa al vuelo.
Ahí
me doy cuenta que es un préstamo maravilloso.
Eso me hace esperar por él.
Victoria
(Un pensamiento.)
Texto agregado el 23-03-2022, y leído por 378
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