Cansado de recorrer el infierno
regresé al cielo,
como un niño tierno
curioso por conocer
qué mágico es.
en el báratro aprendí
más de lo que se aprende
en cielo estrellado,
no es que no quiera
ver su gran belleza,
en el infierno también hay
paisaje y estrellas apagadas
para encender.
Yo soy bien auténtico
y no me dejo convencer
por falsos espejismos ni utopías
que no están a mi alcance.
Volví de nuevo al infierno
en una tarde de verano,
acá también llega el invierno
a calar el pensamiento
los huesos y la médula.
Mis versos eran mezcla
de hielo y fuego,
irá y calma,
rebeldía e inocencia.
Me invitaron al purgatorio
me hice el sordo y ciego,
no quise ver el camino
ni escuchar palabras necias,
pues soy un hombre
de una sola pieza
y un aprendiz de escritor
que no escribe a dos tintas.

AUTOR: PEDRO MORENO MORA
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