EL amor es la piedra que Sísifo empuja….
Don Ismael Serrano, nada menos que otro de los tres veces grandes…
El amanecer encontró a Sísifo a la mitad del cerro empujando su roca
El objetivo como siempre era llegar hasta la cima
Sabía que una vez logrado, esta se caería rodando hasta abajo una vez más, tal como sucedía cada vez que lo lograba
Una y otra vez
Había ofendido a los dioses, quienes para castigarlo, lo condenaron a cumplir esta tarea rutinaria y sobre todo, sin sentido
Una vez, tras otra
Día tras día
Sísifo empujaba su roca hasta la cima, solo para verla caer cuesta abajo y sintiendo la frustración de saber que debía volver al comienzo y empujarla hacia arriba una vez más, para volver a verla caer
Cuánto tiempo llevaba así?
No lo sabía
La monótona rutina había convertido cada dia igual al anterior, y eso había hecho que perdiera la cuenta
Así que sólo veía pasar un dia tras otro cumpliendo su castigo cumpliendo esta tarea que sentía que era absurda
Sin sentido
Pensaba que los dioses podrían haberlo matado, haberlo abandonado en un desierto solo y sin agua, o en alguna salvaje selva completamente solo a su suerte
Donde nadie podría ir en su ayuda
Y donde probablemente habría de morir
Pero no
Su castigo era empujar la roca día tras día para ver que cada vez que llegaba a la cima, la roca se venía abajo hasta al pie de la montana
Entonces debía bajar cansinamente hasta la roca para comenzar de nuevo
Era enloquecedor
A veces se revelaba contra este castigo, maldecía a los dioses lleno de frustración
Les gritaba desafiante a que bajaran y dieran la cara
Que lo enfrentaran
Morir a manos de ellos sería mejor que este destino
Peor los dioses, como todo dios que se precie de tal, eran insensibles e indolentes a las súplicas
A los ruegos
A los desafíos
Solo lo abandonaron
Sin embargo, este trabajo inutil, le permitía pasar mucho tiempo consigo mismo. Y no teniendo nada más que hacer, y nadie con quien conversar
Se ensimismaba
Meditaba acerca de lo absurdo de esta tarea
Pensó, que este trabajo inutil era como la vida misma
Inevitable, insensata
Rutinaria y monótona
De tanto reflexionar, había concluido que subir cada dia una roca que acababa cayendo para volver a comenzar
SIn futuro
Sin sentido
De alguna manera era como la vida misma
Levantarse cada dia, hacer lo que cada uno hace cada dia, llegar a casa por la noche, acostarse a dormir para al dia siguiente volver a comenzar
Y para qué?
Cuál es el sentido de todo eso??
No lo tenía
Entonces por qué lo hacía??
Qué buscaba?
Cuál sería el sentido de hacer todo eso???
No lo sabía
Y no saberlo, solo aumentaba su sufrimiento, porque estaba atrapado
Atrapado por las circunstancias
Cumplir con su castigo
Vivir su vida
Vivir una vida sin sentido ni propósito
Un dia tras otro
Obligado
Sin futuro
En este escenario lleno de introspección, se sumergía en su interior reflexionando acerca de esto
Entonces comprendió que no servía de nada pedir perdón, rogar, o desafiar a los dioses
Los dioses eran ausentes, como todos dios que se precie de tal
Pero, cómo entonces, qué hacer para transmitir sus reclamos, como hacer para hacerse escuchar??
Cómo hacer esta existencia más soportable?
Más llevadera?
Después de dias y dias, habia abandonado la esperanza de ser escuchado
Fue asumiendo su castigo
Comprendiendo que tal como estar vivo, su castigo era inevitable, sin escapatoria
Entonces una idea se formó en su interior
Pues si los dioses lo habian castigado con este trabajo estúpido, y seguro se deleitaían de ver como sufre su destino
Entonces, se rebelaría
Pero su rebeldía tomó otra forma
Aceptaría su castigo, lo asumiría
Ya no habrá más reclamos
No más disgustos
Asumiría su carga con entereza
Asumiría sus circunstancias con alegría y convicción más que con resignación
De solo pensar en la decepción de los dioses de dejar de escuchar sus quejas, sus súplicas y comprender que aceptaba su castigo y su destino sin quejas
Esa sería su rebelión, dejar de rebelarse
Esa sería su venganza contra ellos
Descubrió entonces que esta nueva forma de vivir su castigo, lo hizo más aceptable, más soportable
Fue encontrando dentro de sí una manera de hacer este trabajo absurdo, sin sentido, asumido y aceptado
Hasta entretenido
Y fue así, que dia tras dias, en silencio, convencido, aceptando sus circunstancias sus reclamos desaparecieron
Y fue el castigo el que dejó de tener sentido
Y viendo esto los dioses
Comprendieron que este castigo ya no tenía sentido alguno
Entonces….
Lo liberaron..
Ishamael
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