Quiero un amor subjetivo que me comprenda,
un amor más allá de las ataduras de la razón,
sentimiento verdadero que me lleve al desafuero,
con la fe de las ascetas, con la firmeza de lo eterno,
un amor que no reconozca ni sus propios límites.

Mi deseo es una consciencia que nunca duerme,
pero vive aletargado en un dolor que me deleita,
y necesito la ironía para declararte mi vasallaje
soy el cínico amante que se engañó a sí mismo,
que ensombrecido por la luz que cegó su juicio
te idealizó para recrear en ti su propia imagen,
y ahora se desconcierta ante su propia figura.

Quería un amor subjetivo que me dijese quién soy,
dormido como estoy en esta forjada ensoñación
que yo mismo creé para estar siempre a tu lado,
en el tranquilo remanso de esa augusta quimera,
en ese amor inalcanzable que nunca será objetivo,
porque cuando el amor se satisface el amor se va.

JIJCL 23 de septiembre de 2021