Galaxias infinitas.

Lo que voy a contarles no es algo que hayan escuchado antes, eso es seguro y también es seguro que quizá simplemente, no lo crean pero les aseguro que todo no es más que la pura verdad.
Me encuentro muy lejos de mi planeta, provengo de un lugar tan lejano que quizá ni la mejor mente humana pueda imaginar.
Era muy feliz en mi planeta pero como los accidentes también ocurren en el Universo, mi planeta fue aplastado por una lluvia de meteoros que por su tamaño podrían semejarse a la Tierra. No es muy frecuente que esto ocurra pero por desgracia eso fue lo que sucedió y tuvimos que abandonar nuestro hogar. Quizá piensen que sería imposible abandonar un planeta que se estaba deshaciendo pero eso es porque ustedes no saben qué clase de seres somos.
Les diré que mi planeta estaba rodeado de un enorme Sol igual que la Tierra y que aunque no lo necesitáramos, era hermoso al igual que Lunas de varios tamaños y bellísimas Estrellas a las que visitábamos cada vez que quisiéramos.
Les cuento que allí no existían las guerras, ni el odio, éramos una sola nación y podíamos vivir en el mismo lugar infinitos seres a la vez, no sé si me explico muy bien, acá en la Tierra eso es imposible por supuesto debido al espacio y tiempo y volumen pero allá no había nada de eso, el planeta no tenía nada más que enormes rocas, no necesitábamos ni agua ni siquiera comida y menos aún una casa pero vivíamos en paz y disfrutando de nuestro planeta de una manera completamente diferente al ser humano, nosotros para divertirnos, por ejemplo nos bastaba con imaginarnos lo que quisiéramos, así vivíamos.
Los humanos creen que los extraterrestres son seres verdes y quizá hasta monstruosos pero les diré que nosotros no somos así.
Desde hace siglos, han estado imaginándonos pero nunca llegaron a saber en realidad cómo somos, cuando nos tuvimos que ir de nuestro hogar, cada uno pudo elegir su propio camino, algunos vinimos a la tierra, nos agradaba verla desde el cielo y pensamos que sería agradable hacerlo.
Somos seres muy inteligentes, entre nosotros no existen rivalidades y aunque aquí sí las hay pensamos que quizá con un poco de nuestra ayuda las podrían superar.
El día que llegué sucedieron cosas que a pesar de mi inteligencia no pude prever.
A pesar de toda mi inteligencia pasé por alto algo que ahora lo lamento, nosotros vivimos eternamente pero ustedes tienen una vida cuyo promedio en la actualidad es de noventa años con un poco de suerte y lo peor de todo es que para poder vivir en este planeta tuvimos que ser uno de ustedes, nunca dije cómo somos, ahora es el momento, somos mentes, pensamientos sin cuerpo que podemos viajar tan rápido que jamás el ser humano llegará a hacerlo debido a que a pesar de estar dotados de un coeficiente mental enorme, no han aprendido a usarlo más que un tanto por ciento y esto es terrible ya que quizá jamás lleguen a aprender a usarlo y debo decirles que cuando en la Tierra nace una persona cuyo coeficiente mental supera a la mayoría, ténganlo por seguro de que es uno de nosotros el que ha renacido en él.
Pero como les decía yo fui torpe y como yo muchos más, me olvidé que al ser parte de este mundo, las leyes eran para todos igual y ya casi tengo noventa años y creo que ya me está llegando la hor……..
Omenia. 8/9/2021