Llueve, mientras tanto ella duerme, yo no la quiero despertar. Qué tal esté soñando conmigo haciendo el amor. Me visto a la carrera y salgo a la calle en busca de pan y café. No me importa que los andenes estén mojados. Un perro se viene tras de mi, parece que no tiene dueño y me quiere adoptar. Voy a darle gusto, de hoy en adelante seré su padre. Estoy seguro que se portará bien, me sabrá cuidar de los enemigos humanos, pues no tengo ningún enemigo animal. Amo los animales y ellos me aman. Llego a la tienda y compro de inmediato pan, café, huevos y leche. Enseguida regreso a casa, antes que ella se levante preparo café, a mi perro doy pan y huevo. Después de comer mueve la cola y me abraza. El café ya está listo, huele a pura esencia de café colombiano. Diana se levanta y se sorprende al ver a mi nuevo amigo sentado en el sofá. Él la queda mirando con amor perruno, no demora en conquistarla. Diana va hacia el perro y lo acaricia. Hasta hace un rato era un perro abandonado, ahora ya tiene padres. De repente alguien golpea a la puerta. Mi perro se esconde tras de la puerta. Antes que pueda evitarlo, un ladrón me empuja, luego me amenaza con un cuchillo. No debí abrir la puerta, pero ya es demasiado tarde, estamos a merced del ladrón, quien me pide dinero, antes de dárselo, mi perro salta sobre el ladrón y le muerde la mano. El ladrón suelta el cuchillo, antes que se recuperé agarro la escopeta con la intención de dispararle, cuando voy hacerlo mi perro ladra fuerte, luego va hacia el teléfono y me indica que es mejor llamar a la policía, no quiere quedarse sin padre.

AUTOR: PEDRO MORENO MORA