esto de ir a votar nunca me gusto... recuerdo mis epocas de estudiante, con mis pancartas por un derecho a lo que escuchaba de mis compañeros... como un loro... mis encuentros con el rector de la universidad y lo cerrado que estaba... tanto así que la secretaria salió para decirme: ¿Qué le has dicho?... Le dije lo que sentía en mi interior... y el tan solo dijo que no porque no, dejándole solo con su verdad ya amainada ante una fresca verdad de tiempos inmemoriales...
allí supe que mi vida valía algo mas que las palabras que escuchaba en la gente que hablaba o pensaban en mi...
dejé la universidad porque no era lo que me llevaría a mi destino y eso lo tenia claro... quería algo diferente a todo aquello que escuchaba en las calles y en los pasillos de la universidad...
ya mayor me he encontrado con viejos compañeros... unos llenos de prosperidad, otros con empleados de seguridad ante el temor de represalias ante un poder ya conseguido... y uno que otro metido en la política y uno hasta postulante a la presidencia... y muchos han desaparecido... quizás hayan muerto o sus vidas se hayan quemado ante el fuego de las ambiciones...
me llamaban genio porque sin estudiar podía resolver problemas ante el catedrático sin leer nada... no sé como lo hacía... pero me era fácil llegar de la A la D sin necesidad de pasa por la B y C... simplemente pasaba... escuchaba una voz que iluminaba mi mente y salía algo que plasmaba en mi limitado vocabulario en gestos y números... deje la universidad con este entendimiento... porqué voy a caminar aquel sendero que se adonde me llevara... y no doy la vuelta y regreso por donde he salido... y pregunto al hacedor el porque estoy aquí... para qué me ha traído aquí... y que debo hacer aquí...
dejé todo por este sentimiento... y salí de mi confort por algo que jamás he pisado...
vi muchas cosas hermosas... me enamore... casi me vuelvo en un violador... aprendí que soy una persona llena de todos los defectos y todas las virtudes del mundo... eso me hiso comprender a la humanidad mejor... aprendí que debo agradecer todo... ya sea lo malo o bueno... aprendí a ver en el ladrón, los ojos de dios... aprendí a ver el amor y el perdón en la persona que daño me hacía... y si bien hubo veces en que me dieron grandes golpizas, pude ver el poder del creador en las pupilas de mi agresor... el dejar el sexo por una sonrisa... y a amarme a mi mismo mas... algo así...
y ahora, en medio de tanta locura por el miedo a perder, cuando de todas formas vamos a perderlo todo... sin embargo, somos criaturas especiales... nos gusta salir de la inercia del aburrimiento o el diario quehacer... salir y ver al menos un suicida, una loca desnuda, un perro atropellado, una noticia mala y miles de casas y gente carbonizada para olvidar nuestra realidad que estamos lentamente muriendo sin notarlo...
de allí en que saldré a votar y si bien sé que la política es una enfermedad, así los grandes hombres de este mundo no están en la política, están en nuestros corazones... algunos están muertos pero viven en nuestros recuerdos... otros muchos siguen bajo el reino del miedo, miedo a que perdamos lo mucho o poco que tengamos... miedo a la noche, a lo desconocido, al cambio, a tantas cosas tememos... pero olvidamos que el miedo es la ignorancia o dejadez por el encuentro por la verdad...