Mis pensamientos los escucha el viento que fía interés. Se puede no ser puesto no soy más Raúl pero si un alma. El puerto de Tigre es un núcleo del rio con sus barcos. Voy regresando sin boleto ni necesidad solo por vanidad. Pulcro el barniz el sonido del motor es omnímodo. Voy con el timón entre palos de amasar cual rayos del sol. De costa en costa de muelle en muelle sin alfileres. Solo llego tarde pues las almas no mueren sino regresan. Marean las olas y el enjunto duelo el equilibrio. Si vomitase saldrían corazones de amor flechado. En los pasillos piernas y rodillas son la sustancia. De los muslos hacia arriba, varones, damas, según sea. En las maniobras la hélice en reversa peón y soga. Grande espuma madera y granito fin del paseo.
Texto agregado el 15-05-2021, y leído por 58 visitantes. (0 votos)