Hay que merecer lo que uno desea, y no siempre el destino le va a querer dar a uno lo que uno quiere, pero entonces hay que anhelarlo mucho para así poder llegar a recibir en algún momento el premio del destino; la naturaleza siempre va a premiar a las personas estudiosas, siempre hay un premio para las personas que estudian con ahínco, para las personas que estudian con valentía, si no estudiamos con valentía no seremos capaces de transformar el mundo, no seremos capaces de hacer del mundo el lugar ideal para todas las generaciones vivientes sobre el planeta.