Érase una vez Lulú y su familia fueron al campo, a pasar un día de picnic.
Tomás y Julia hermanos de Lulú ayudaron a papá y mamá a colocar el mantel y todo lo necesario para ese día tan especial.
Después de terminar los niños, fueron a jugar con la pelota y corrieron muy felices disfrutando de la naturaleza.
Cuando de repente su madre los llamo para que almorzaran.
- Niños lávense las manos que vamos almorzar. Dijo su madre
- Está bien mamá enseguida vamos. Contestaron los niños.
Los niños estaban comiendo, cuando de repente Lulú le pregunto a su madre:
- ¿Mamita, tu sabes qué es el amor?
- Claro que si hija, escuchen niños, cuando terminen de comer, quiero que vayan y me traigan dos cosas que encuentren y que más les guste.
Dijo su madre.
Los niños terminaron de comer rápidamente y fueron en busca de las dos cosas que mamá les había pedido y que más les gustara a ellos.
Julia encontró una hermosa mariposa y una linda flor roja, y se las llevó a mostrarle a su madre.
Tomás encontró un lindo conejito y un pequeño pajarito y también fue corriendo a mostrarle a su madre.
Cuando Lulú llego no tenía nada en sus manos, su madre le pregunto por qué ella no había traído nada.
¿A caso no encontraste nada que te gustara? Preguntó su madre.
Pero Lulú respondió:
- Si mamá, yo vi muchas cosas lindas como esa mariposa revoloteando feliz, y no quise atraparla para no quitarle su felicidad.
- También vi esa flor roja, pero al verla tan hermosa y perfumada no quise cortarla.
- También vi al pequeño conejito jugando con sus hermanitos y no me atreví a separarlo de su familia.
- Y por último encontré al pajarito que se había caído de su nido y lo regrese junto a su madre y ella se puso muy feliz. Así que no pude traer nada mamá, lo siento.
- Pero, hija no tienes por qué preocuparte, porque lo que tú hiciste eso es el amor. El amor es un sentimiento de afecto universal que se tiene o se siente hacia una persona animal o cosa. Dijo su madre.
Finalmente los niños entendieron el gran significado de esa palabra tan maravillosa, como es el amor, que Tomás y Julia inmediatamente soltaron a los animales que ellos tenían atrapados.
Fin