En España se publicitan centros educativos como plurilingües con ánimo de captación de alumnos.
Los datos hablan de una pésima competencia lingüística en las lenguas autóctonas y lenguas madre; competencia que irá a peor dada la falta de consideración hacia la lengua oficial del Estado, el español, que deja de ser vehicular según los dictámenes del actual Gobierno.
A mis padres les ladro pues no domino la lengua autóctona pero balbuceo en inglés, chino, swuahili y hasta en esperanto.
El dominio de lenguas, cuantas más mejor, no cabe duda de que es enriquecedor. Profesores que han seguido experiencias de educación bilingüe durante 15 años concluyen que esos alumnos son mejores estudiantes, tienen más capacidad de resolver problemas y más habilidades verbales. El plurilingüismo incluso previene el alzhéimer.
No obstante , digo yo que habrá que esmerarse en que se dominen las lenguas propias.
¡ Qué papanatismo y esnobismo tan ridículos!