Es el crepitar agónico de las nervaduras que incendió el otoño.
Arden los últimos tigres
y el aire se habita
con el preludio estridente
de los enjambres.
Brincan mis párpados
en espera de la primavera
y su máscara de geometría.
El mar lo sabe
y entrecruzando los brazos va susurrando
los dictados que se derraman en las orillas.
Y parecen volverse mías
las lentas tardes.
Primavera
Baúl de los trinos
Escapulario musical de las ramas
Los bosques primaverales de mi tierra
parecen morderle los bordes al Universo
Presurosos
bajan
los ríos,
con el centro
de su alma
besada
por los témpanos
Y la brisa es la saeta
que descascara los estanques.
Tierna estación.
Tornasolado atrio de las mariposas.
Los vidrios perfectos de tus naves
son la sustancia de mis cantos.
Texto agregado el 16-02-2021, y leído por 160
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Lectores Opinan
05-03-2021
Bello paisaje que uno puede sentir, como un estremecimiento, de forma incontrolable. Gracias por compartir crom
23-02-2021
Hay buenas imágenes desprendiéndose de la chicha y la empaná venidera. Me gustó el trazo. Saludos desde Iquique Chile. vejete_rockero-48
18-02-2021
Describes un paisaje que involucra a esos meses, muy bello...
Me encanto tu decir y las metáforas que bailan en un maravilloso cuadro...
*****
Un fuerte abrazo
Victoria 6236013