Martes de mañana, Ciudad de León - México.
Para cuando llegó la policía, apenas un hilo de sangre brotaba por la garganta de Joaquín. El resto se apozaba en un charco espeso y oscuro. La habitación olía a hierro, a pesadez, a muerte.
Su asesino, un sicario contratado por Los Zetas —que se disputaban el dominio de la ciudad de León— le había dado muerte por error, al confundir el departamento 609 con el 906.
El infortunado cadáver de Joaquín yacía sobre el piso. Su cuerpo rígido, su alma vagando en otras dimensiones. Inocente en su muerte.
Jamás se encontró a su asesino. No había pista alguna que ayudase a resolver el porqué de su triste final; mientras en el 609, Manuel encendía la TV y se llevaba un potiche de comida y una cerveza a su sillón favorito, ajeno a la suerte de su existencia...
Martes, pasado el mediodía. Toledo - España.
Cristina corrió hasta el estacionamiento y tomó el auto de prisa. Sus hijos le esperaban a la salida del colegio desde hacía media hora; su reunión se extendió más de lo esperado produciendo el atraso. La lluvia entorpecía aún más su desplazamiento.
Debido al atochamiento que se formaba, eligió calles aledañas para evitarlo, calles que no conocía del todo. La bicicleta surgió de improviso no pudo esquivarla y, tras el fuerte impacto, esta fue a quedar incrustada contra el poste de luz; su piloto, un joven de no más de 17 años, fue lanzado varios metros más allá. Su cuerpo convulsionaba bajo el impermeable transparente que lo protegía de la lluvia, pero no de los golpes. Cristina en tanto se ahogaba entre los fierros retorcidos de su auto volcado... la lluvia se mezclaba suavemente con su sangre y la tibieza de su cuerpo poco a poco se inundaba con el frío de la muerte.
Martes, anochecer en Aeropuerto de Verona-Villafranca.
Los 250 pasajeros; hombres, mujeres, niños y ancianos, abordaron felices el boing 787 de Avianca con destino a Ezeiza, Buenos Aires, Argentina.
Algunos por vacaciones, otros por negocios, otros por amor. Era el caso de Regina, quien había conocido a Ferdinando a través de una página de Literatura en internet. Se revolvía con nerviosismo en su asiento y meditaba —en persona: ¿Despertará en mí las mismas emociones que al teléfono? — esa y otras tantas preguntas invadían su mente, mientras llena de anhelo y esperanza perdía su vista hacia el exterior de la pequeña ventanilla.
De pronto, el cielo tembló ante un estallido. Ninguno de los pasajeros intuyó siquiera que su destino sería tan diferente.
***
Miles de vidas son truncadas minuto a minuto; ya sea por un accidente fatal, una muerte repentina, un error garrafal o una enfermedad. Y es que nuestra vida baila eufórica en una cuerda suspendida en el abismo.
Segundo a segundo estoy muriendo. Tú también.
M.D
_____________
Una recomendación Clorinda: No intentes pensar como el escritor.
Si digo "El infortunado cadáver de Joaquín yacía sobre el piso (...)" es porque precisamente eso quiero decir, ya que es el envase el que está en el suelo. Joaquín vaga en otras dimensiones
Sobre: "su cuerpo rígido (...)":
No corresponde tu sugerencia, ya que ese es el orden sintáctico correcto (sustantivo acompañado de adjetivo, o sustantivo en acción acompañado de verbo). Lee sobre el "Sintagma nominal".
Sobre los punto y coma que criticaste en donde digo "minuto a minuto":
"Miles de vidas son truncadas minuto a minuto; ya sea por un accidente fatal, una muerte repentina, un error garrafal o una enfermedad. Y es que nuestra vida baila eufórica en una cuerda suspendida en el abismo" .
No lo atendí pues comienzo una enumeración compleja, por lo que en ese caso está bien aplicado.
Otras sugerencias de comas también las omití pues no vienen de un conocimiento sólido y certero ya que tú también las usas u omites erráticamente; esto queda en evidencia en tu nulo uso de la coma hiperbática, recurso que (al igual que yo) usas bastante, pero el cual no puntúas como corresponde (yo sí, y tomando en cuenta aquello es que entiendo que "te sobren comas" en mis escritos).
Comentario aparte, hace un rato ya tengo la percepción de que vienes persiguiéndome con tu temita de comas y puntos. Es más, en el foro -entre un montón de textos- con los míos fue con los que más te explayaste, ¿Por qué?
Finalmente, me parece una impertinencia de tu parte que si no te atendí en el foro y guardé silencio, vengas a mi blog a insistir con tus pseudo sugerencias; que la verdad no son un aporte real pues surgen de una cuestión de "gusto" y no desde un fehaciente conocimiento sintáctico y gramatical.
|