Cuando vimos las nubes, llegando desde el oeste, ni mi padre, ni yo, imaginamos el diluvio.
Conversamos sobre qué era lo mejor , y finalmente decidimos que él viajaría con la camioneta a Tucson a buscar repuestos para el molino, y yo, me quedaría a cuidar el ganado, reparar los alambrados, y hacer el ordeñe.
A sus setenta y dos años poseía una gran voluntad, pero menos energía que en otros tiempos.
La sequía nos acompañaba desde hacía tres meses, y creí que mandarlo a la ciudad en la vieja Ford, sería una distracción para él con poco esfuerzo físico.
Pero tal vez no fuera lo más acertado, pues los caminos seguramente a esa hora, ya serían tremendos lodazales con la camioneta hundida en el barro y mi pobre padre, todo empapado tratando de poner algo firme bajo las ruedas.
Veía su angustia cuando lo miraba, aunque tratase de esconderla.
Meses atrás, debimos mandar a las mujeres y los niños a Colorado a casa de unos primos, para que no padecieran esta época de escasez extrema.
Pero sin duda lo que más lo había golpeado, era la desaparición de su hermano menor.
Al tío Jessie, se lo había tragado la tierra.
Partiendo a mediados del año anterior rumbo a Oklahoma a concertar negocios con viejos clientes, nunca llegó a destino. Lo buscamos por meses, pero no pudimos saber nada de él.
Extrañaba los momentos en que los tres éramos un equipo.

Había debido suspender las tareas a media mañana, luego de patinar y caerme en el barro unas tres veces. No podía darme el lujo de lesionarme, y dejar que papá hiciera más esfuerzo de lo que pudiese.

En varias oportunidades durante el día dudé sobre salir a buscarlo, pero con semejante lluvia tardaría unos tres días en alcanzarlo.

Pedí a Dios que acompañara a mi Papá en este viaje, y que dejara para mí los desafíos más grandes.


Ya casi era de noche y la tormenta no cesaba. Pude terminar el ordeñe y rehacer la cerca de los puercos.
Comí unos guisantes y me fui a dormir, esperando que el aguacero terminara.

En un cielo agitado, los truenos, se sucedieron durante horas. Un rayo, cayó en un campo vecino produciendo un estruendo, que sacudió la tierra e incendió un viejo árbol.
Lo vi arder a la distancia y no pude más que estremecerme pensando en mi padre.

Eran como las cinco de la mañana, y me propuse descansar al menos un par de horas.
Ya semidormido, noté que amainaba el aguacero y la tormenta eléctrica cambiaba a suave llovizna.

Creo que fue entonces, cuando me dormí.

- Quiero ver a ese sobrino.

- Pensará que eres un fantasma.

- Apuesto a que sale corriendo.

- Déjame hablar con él, primero.

- ¡Qué demonios! quiero darle un abrazo a mi negro carbón ahora mismo.

Un ruido me sobresaltó. Era la puerta de mi dormitorio.
Quise tomar la linterna de mi mesa de luz, cuando lo vi. Era como un espectro. Toda oscuridad, a no ser por su sonrisa, que brillaba por la luz de la vela que sostenía con su mano.
Detrás de él pude ver a mi padre, que me miraba preocupado esperando mi reacción.

El abrazo fue muy intenso, y me costó abarcar a ambos a la vez.

Más tarde en la cocina, pude conocer los detalles:

Una gran tormenta del año anterior hizo que un árbol cayera sobre la cabeza de mi tío, dejándolo inconsciente. Horas después, un viajante lo recogía para llevarlo al hospital de la ciudad. Todas sus pertenencias habían sido robadas. Despertó pasados dos días, con una amnesia que le duraría unos cuantos meses.

Fue recién una semana atrás que había podido recobrar completamente su memoria.

- No vas a creerme hijo. Cuando la camioneta se me quedó en el barro me desesperé, porque la tormenta se ponía cada vez peor. Mientras forcejeaba con un tronco intentando sacarla de la huella, escuché la voz de este atrevido:

- ¿Por qué no dejas que cuatro manos hagan mejor el trabajo?

-Si hubieras visto a tu padre, con esa cara de espanto.

No hubo sueño esa noche. Brindamos y reímos con ganas.
A la tarde, partimos a buscar a las mujeres. No nos importó todas las veces que la vieja Ford se encajaría en el barro.

Una nueva racha comenzaba. Y estábamos juntos.


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Marcelo Arrizabalaga.
Buenos Aires, 30/11/2020.


https://youtu.be/qJrBEFTLW5c?si=B771Y_005toUDwPt