El dolor no espera, ni sabe de horarios,
despierta como el sol
y busca fortaleza
en cada itinerario.
Aprende a resistir en medio del desierto
buscando un horizonte que no existe.
Cada noche las tinieblas
absurdas que lo asisten
siembran sombras poderosas
y mientras tanto el iinfierno
colmado de ocasos,
escarba en viejos surcos del pasado
y encuentra solo ausencia
al otro lado.
Texto agregado el 26-11-2020, y leído por 101
visitantes. (3 votos)
Lectores Opinan
27-11-2020
Es un texto muy bello que al leerlo hace eco y al lector lo deja reflexionando.
Con tristeza y a la vez admirando tu decir que hace que tus letras lleguen profundamente*****
Un fuerte abrazo
Victoria 6236013
Mi niña querida...describes muy bien el proceso!... quizás no están las personas que deseamos, pero lo que brinda un poco de alivio es pensar que son muchas las personas que sufren. Muchas veces el dolor recrudece al pensar en él como un castigo, personalemente lo considero un maestro. Un abrazo y todas las constelaciones, que te envuelvan en un cálido abrazo crom
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