La diferencia de estar contigo parte 16

Uno de los compañeros de Jaime nos dijo que en la plaza donde trabaja cómo guardia de seguridad, asaltaron el banco principal. Dos guardias lograron entrar al banco y les dispararon muriendo de inmediato. Los maleantes al intentar salir de la plaza entre Jaime y otro compañero los persiguieron, cuando Jaime le dispararon en el estacionamiento, los rateros fueron captados dos calles más delante de la plaza.
Lo peor venía para Jaime. La empresa de seguridad envió a su abogado, pero no pensaban pagarle ni un centavo por lo que pasó. Carlos se dispuso a ayudar a su hermano para que le pagaran una incapacidad, pero no fue así. Jaime despertó después de la cirugía, todo había salido bien, ahora se esperaba una recuperación. El padre de Jaime estaba muy asustado, era un hombre enfermo, que lloraba en el pasillo, tomaba su sombrero en pecho y lloraba afligido.
Pasé a ver a Jaime, necesitaba verificar que se encontraba bien.
- ¿Cómo te sientes? – pregunté.
-Cómo si un tráiler me hubiera pasado por encima – expresó débilmente.
-Vas a estar bien. El médico dice que te vas recuperar pronto.
- ¿Y mi papá? – preguntó.
-Él está bien. Está aquí. Por él no te preocupes. Se irá con Carlos a su casa – le respondí.
-Gracias.
-Carlos está arreglando todo lo del seguro.
- ¿Carlos? – Cerró los ojos y se lamentó de algo – no sé ni qué cubre el seguro de mi trabajo.
-Carlos se va a encargar de eso, tú debes estar tranquilo y ocupado en tu recuperación.
Alfonso el padre de Jaime pasó a ver a su hijo antes de que el chofer lo llevara a casa para que descansara.

Jaime salió del hospital y se fue a casa de Carlos para que estuviera bien atendido. Alfonso estaba delicado de salud, pero no dejó solo ni un minuto a su hijo. También se fue a casa de Carlos para que estuviera bien. Aunque para el señor es complicado ver a dos personas iguales, no hacía muchas preguntas.
Terry me acompañó a la casa de Carlos para que Jaime estuviera con Matías un rato. Carlos insistía en que deben demandar a la empresa para que le proporcionen un seguro, pero ellos no se hacen responsables de nada.
-De verdad, yo no quiero estar así. Son muchos problemas y dinero que no tengo para pagar eso – Jaime no quería dar problemas
-Nadie te está cobrando. Es un servicio para ti. Mi esposa y yo estamos trabajando para que la empresa pague la cirugía y todo lo que se ha gastado. Es verdad que el seguro que ellos te dan, no cubre un asalto, pero vamos a demandar de eso me encargo yo.
-Tú debes preocuparte por tu salud y ya – le insistí.
-Todavía no les avisan a mis otros hermanos.
-Tu papá me dio los datos y yo misma me puse en contacto con ellos.

Continuará…