La diferencia de estar contigo parte 11

Salté del susto y los invitados que se encontraban en la mesa me miraron por la actitud que tuve. Era increíble, delante de mí estaba Jaime, pero con menos peso y el cabello menos crecido y anteojos redondos, era él, pero no era él.
Yo no le quitaba la miraba de encima, llegué a incomodarlo tanto que se levantó de la mesa. Me quedé en la mesa sin poder pronunciar palabra alguna. Yo lo buscaba, pensaba que había sido parte de una alucinación, pero no. Al pedir mi carro se acercó a mí.
-Disculpe ¿nos conocemos? – preguntó él.
-Si. Usted es igual a mi ex novio. Tiene la misma voz, la misma cara.
-Tal vez nos parecemos.
-No. De verdad ustedes son iguales – le mostré una foto de nosotros juntos y se sorprendió.
-Es sorprendente. Búsqueme – me dio su tarjeta al leerla se trataba de Carlos Garza.
Mi estómago se revolvió y por mi boca expulsé la cena. Le llamé a David, suponía que me iba a sermonear.
-Vi tus llamadas ¿Qué pasa? Preguntó David.
-Terminé con Jaime.
-Esa es una buena noticia – David no quería a Jaime – ¿qué pasó?
-Primero fuimos a comer y al pagar la cuenta no pasó su tarjeta, el efectivo no era suficiente y yo pagué. Después nos encontramos a Ismael.
-Tiene meses que no lo veo.
-Es un desgraciado, no se cansó de humillarlo.
-Él es así, pero ¿eso que tiene que ver?
-Hablaron de sus viajes y todo eso, yo también, pero Ismael le preguntó a Jaime si ha viajado y él le respondió que no. No tiene dinero y debe pagar las medicinas de su padre. Yo no lo defendí y permití que lo trataran así. Salimos y me dijo que no tenía caso seguir juntos. Que no pertenecemos al mismo nivel.
-Eso es cierto. Tú no puedes ocultar todo lo que tienes, te ha costado, si ese tipo no tuvo las mismas oportunidades es problema de él. No debió actuar así, debe estar orgulloso de ti, en lugar de ser un ejemplo para él eres una competencia ¡vaya gusano! Pero dime, esa cara no es por terminar con él.
-No. Fui al médico porque me sentía mal. Y estoy embarazada.
-Bravo. La mejor decisión fue tener un hijo de ese animal. ¿Qué piensas hacer? ¿Le vas a decir?
-No lo sé.
-Creo que debes decirle, aunque a tu hijo no le faltará nada, crecer sin un padre no es algo que yo quisiera. A mí me pasó, no sería justo que le pase eso a tu creatura.
-Eso no es lo peor.
- ¿Hay algo más?
-Encontré al gemelo de Jaime.
- ¡Vaya! Si que es una novela.

Continuará…