Ojos de montaña y la boca salada
Sentado en una silla victoriana
La montaña de clima templado
Y la sal es de un mar agitado
Azul cerúleo con blanco, la silla
Te pienso y me hueles a arcilla
Ven, quiero conjurarte en canciones
Bailarte en tacones, saltar en balcones
Llueve y te extraño hasta las pestañas
¿Y tú? ¿Te lluevo? ¿Me extrañas?
Texto agregado el 15-09-2020, y leído por 217
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Lectores Opinan
27-09-2020
Este si es un bello poema. "Te pienso y me hueles a arcilla." +5 Nazareo_Mellado