Miro hacia atrás y veo que me sigue, mi corazón salta y se acelera con cada paso que doy, me detengo, se detiene conmigo, no avanza. ¿Qué sucede? ¿No ibas tan deprisa? Retomo el paso, y vuelve a retomar el paso. No quiero correr, no quiero que huela mi miedo, no quiera que sienta el poder que ahora tiene sobre mí, cierro mis ojos con fuerza, no quiero estar acá, siento su mirada encima mío. Sigo desplazándome, veo a mucha gente mirándome e ignorando lo que está sucediendo ¿No entienden que me vienen siguiendo? Esquivo a las personas que me estorban, intento mimetizarme entre la multitud, no funciona, doy vuelta en la esquina, da vuelta en la esquina, no quiero estar acá, quiero estar en mi cama, intento convencerme que es una pesadilla, no funciona, corro y ya nada me importa, lloro y muerdo mis labios, a lo lejos veo mi madre que me espera con los brazos abiertos, me escondo entre su falda para secar mis lágrimas, ella me acaricia mi pelo, mira al cielo y dice: ¡Vaya! Hoy si la luna está enorme. |