Este hecho ocurrió el día 10 de junio 2020.
Sevilla Prado de San Sebastián. Soy de pueblo. He venido para ver al médico. Tengo 72 años. Subo en el autobús línea 22 voy a Sevilla Este.
Yo: ¿Cuánto es?
Conductor: Con dinero no.
Yo: ¿Con tarjeta?.
Conductor: Tampoco. Compre un bonobús.
Yo: Déme uno.
Conductor: No lo vendo, busque un kiosco o un estanco.
Yo: Hay máquina expendedora:
Conductor: No
Salgo desesperado los kioscos cerrados, no veo estancos.
Entro en la Estación de autobuses, prado de San Sebastián. Hay un kiosco pero cerrado.
Me dirijo a un policía.
Yo: Perdone, tengo un problema, no deja de ser una tontería pero para mí es un problema.
Policía: Dígame.
Yo: Necesito un bonobús y los kioscos están cerrados.
Policía: Pues verdaderamente tiene usted un problema.
Me indica donde hay un estanco.
Son casi las dos y va a cerrar.
Entro en el estanco.
Buenas tardes, deme un bonobús para dos viajes, ida y vuelta.
Estanquero: Hay que comprar una tarjeta que vale un euro y medio y lleva cargados 10 viajes que hay que pagar también, de menos no hay.
Yo: Bien.
Los sevillanos tienen bonobús pero…
¿Alguien pensó en la gente de pueblo?. Diariamente llegan a Sevilla varios miles de personas de pueblo a realizar distintas gestiones y no tienen bonobús.
El servicio de autobuses urbanos de Sevilla lo gestiona TUSSAM que es una empresa pública municipal.
Señor alcalde, señores regidores, señor gerente de TUSSAM, a la hora de tomar una decisión hay que pensar en las consecuencias que pueden tener sobre todo para los más vulnerables.