Escapar

Salir de aquí, juntos, de la mano, quizás.

¿Qué a dónde iríamos? No lo sé, lejos.

Trataría de encontrar un lugar apartado de todo el ruido, de tanto recuerdo y palabrería.

El silencio, ¿lo imaginas? Por fin, el silencio absoluto, claro si ignoramos algunas minucias como todos esos ruidos de las pequeñas alimañas y bichejos que estarán con nosotros.

¿Nos vamos? Anda, di que sí.

Lo haremos silbando y con las manos en los bolsillos. Tú solo ignora que están vacíos, no vamos a necesitar dinero en el lugar al que nos dirigimos.

¿Cómo que con qué se paga? Es otro tipo de cambio, no le des tanta importancia. Usaremos tiempo, nuestra preciada cuenta atrás, esa es la única moneda que gastaremos.
¡Exacto! Cómo si aquí encerrados, asustados y atrapados le estuviésemos dando un buen uso.

Mira, lo haremos hoy…lo tengo todo planeado, tú solo asómate por tu ventana atentamente y espera. En cierto momento de la noche, cuando la luna se encuentre justo entre las dos estrellas más brillantes, pasaré por ti. Para cuando todos despierten y vengan a revisar si seguimos en nuestras pútridas celdas, no estaremos más.

Yo nunca pude cogerle cariño, ¿sabes? Y mira que lo he intentado.

Ya sé, ya sé. Yo también tengo miedo, no creas que no siento vértigo por todo esto.

Lo importante es que lo haremos juntos, de la mano, quizás.