Cuando la realidad supera la ficción
El DRAE (Diccionario de la Real Academia Española) dice cerca de:
Impoluto, ta
adj. Limpio, sin mancha. (usado también en sentido figurado)
En medicina:
psicodélico, ca
[estado psíquico] Que está provocado por ciertas drogas y se caracteriza por una alteración de la sensibilidad que se manifiesta con euforia y alucinaciones.
Hace semanas recibí un mensaje en mi libro de visitas (LDV) de un miembro de esta comunidad inconforme por mis comentarios. Aquello correspondía de mi parte una respuesta. Así lo hice en su LDV, siempre con cortesía, aunque respaldando mis observaciones. El mismo interlocutor me volvió a escribir, como era de esperar, entré a su libro para la respuesta, pero me di con la sorpresa que mi anterior mensaje lo había borrado. Lo tomé como una cosa anecdótica, por lo que opté ya no escribirle respuestas en su libro sino en el mío.
En estas dos ultimas semanas, otros miembros me han escrito, de entre ellos algunos han borrado mis mensajes es sus libros, razón por la cual he optado por hacer una copia en mi libro de visitas. Cada quien es dueño de su LDV y administrarlo según sus criterios.
Lo que si he observado es que el uso del borrador digital no era algo anecdótico más bien común, un deseo irrefrenable de tener un libro de visitas impoluto.
Mi reflexión va por otro lado.
Hay personas que quieren vivir en el Jardín del Edén, en un mundo donde el paisaje es psicodélico. Se aferran a sus alucinaciones y a una permanente euforia, esquivando la realidad cada vez que puedan.
¿Hasta dónde pueden llegar con ese estado psicodélico?
Desde las redes sociales publicando fotos retocadas, selfies tomadas en ángulos y luces que jamás reflejarán la realidad, para hacer crecer el número de amigos que nunca verán; o desde plataformas como esta, La Página de los Cuentos, publicando textos sin importar cumplir con las reglas ortográficas y gramaticales, escribiendo poemas sin ser poemas y cuentos sin ser cuentos.
Como decía, desde las redes sociales hasta la realidad física actual. Salen de sus hogares, se relacionan con las personas, hacen sus compras, van a cafés y restaurantes, pues, como el virus no se ve, tampoco existe en sus mentes. En un mundo psicodélico se sienten invencibles contra el COVID-19.
Como es de esperar, en los jardines psicodélicos, cual dioses iracundos, borran mensajes, insultan, y expulsan verbalmente a los pecadores desobedientes a los mandamientos divinos (divinamente psicodélicos):
1. Amarás al autor(a) por sobre todas las cosas
2. Santificarás sus publicaciones con comentarios bonitos y dulces
3. Alentarás para que siga escribiendo antipoemas y anticuentos
4. No señalarás los errores ni de fondo ni de forma
5. No tienes derecho a dar opiniones con sustentos reales
6. Escribirás solo felicitaciones en el libro de visitas
En ese idílico universo psicodélico de aquellos soy un pecador convicto y confeso.
|